Luis Ventura es un histórico periodista de espectáculo que a lo largo de su trayectoria ha sorprendido en más de una ocasión con sus originales y controvertidas ideas a la hora de encarar hechos periodísticos. Esta vez, el conductor fue más allá y sorprendió a todos al realizar una entrevista desde un ataúd.
En su cuenta de Instagram, Ventura se metió a un féretro para responderle algunas inquietudes a Silvia Freire. El conductor de Secretos verdaderos, programa transmitido los fines de semana en América, se sinceró sobre lo que cree que pasará después de su muerte. “Cuando pase esto, cuando el cuerpo no esté, ¿vos creés que el alma va con tu viejo, por ejemplo?”, le consultó Silvia, parada al lado del cajón, mientras Luis se encontraba dentro del mismo, lookeado con traje negro y con las manos sobre el pecho, imitando a un recién fallecido.
Por este suceso televisivo el conductor recibió críticas desde todos los ángulos, como en sus redes sociales donde muchos fans coincidieron: “Que mal gusto”, le expresaron al periodista.
Ventura dio detalles de su entrevista en LAM
Luis Ventura asistió como invitado a LAM (América TV) este miércoles y brindó detalles de su entrevista dentro del ataúd, algo que horrorizó a las angelitas.
“Esto no es normal, Luis”, le dijo Pía Shaw, a lo que el periodista contestó: “Quiero desdramatizar lo que es la situación. A mí la muerte no me mueve un pelo, salvo que sea de alguien que quiero porque es una partida que uno la siente. Pero no me da miedo la muerte; la muerte está adentro de la vida. Yo me acuesto a dormir con las cenizas de mi padre y mi madre, y todos los perros que tuve, en el dormitorio”, reveló Ventura.
Además, el periodista profundizó: “Empezamos a hablar de la muerte y me preguntó si me animaba a acostarme en el ataúd. No dejé que me cerraran la tapa. Me preguntó cómo me sentía, mi mirada sobre la vida, la muerte... nada más. Mi familia me llamó para putearme”, cerró Luis Ventura su relato.
Tras escucharlo contar su experiencia, las angelitas se mostraron horrorizadas y expresaron: “Es un montón”, “Me parece un espanto”, “No me parece divertido”, “No lo entiendo”.