Los test de personalidad están de moda y suponen uno de los entretenimientos con más éxito en las redes sociales, por eso suelen hacerse virales con facilidad.
Estos juegos mentales permiten conocer un poco más de vos y de quienes te rodean, especialmente, sobre aspectos ocultos de la personalidad. Además, son rápidos y entretenidos, lo que hace que podamos pasar el tiempo leyendo sobre ellos.
Conocerse uno mismo permite saber lo que queremos en la vida, ya sea en grandes proyectos o en el día a día. También permite saber gestionar mejor nuestras emociones incluso en las situaciones más difíciles.
En este caso, el reto visual conlleva a que sepas cuantas siluetas de gatos podes encontrar para definir qué edad mental tenés.
TEST VISUAL: MIRÁ LA SIGUIENTE IMAGEN Y RECORDÁ QUÉ VISTE PRIMERO
¿QUÉ SIGNIFICA LO PRIMERO QUE VISTE EN LA IMAGEN?
A continuación, te mostramos las respuestas de tu personalidad según lo primero que hayas visto.
Uno o dos gatos
Si viste hasta dos gatos es porque tu edad mental se quedó en tu adolescencia. Al respecto, todo indica que todavía sigues atrapado en tus sueños. Sabes divertirte y eso es positivo, puesto que la vida puede volverse pesada, pero tienes que equilibrar el goce con la responsabilidad.
Tres gatos
Si viste un gato más que los de mente adolescente, tenés entre 20 y 30 años. Esto solo podría ser bueno para aquellos que tienen la mente joven o se encuentran parte del mismo grupo de edad. Lo que más destaca es tu talento analítico y tus ganas de luchar por lo que te importa.
Cuatro gatos
Si viste cuatro gatos significa que tu edad mental es la de una persona de más de treinta años. Tienes cierta madurez y gran sentido del humor, motivo por el que tienes grandes amigos, a los que casi no ves por las responsabilidades de tu vida.
Cinco gatos
Encontrar cinco gatos quiere decir que tienes la edad mental de alguien de cuarenta años en adelante. Lo más importante en ti es tu amplia experiencia de vida, así como toda carga cultural. Posees una ética considerable, lo que es muy valorable y tu sabiduría puede pecar de soberbia.