Los tatuajes, símbolos de expresión personal y arte en la piel, han llevado a Katie Taylor a ser el centro de la polémica. La madre de una niña de 2 años decidió rendir homenaje a su hija con un tatuaje en el rostro, un gesto que ha provocado controversia en las redes sociales.
La joven británica de 27 años, ya acostumbrada a las críticas por sus numerosos tatuajes entre sus seguidores de TikTok, no anticipó la intensidad de la reacción que generaría este último. Ella desde los 18 años se tatúa y esta vez, decidió realizarse una pequeña rosa cerca de su oreja derecha, con finalidad de mostrar su amor maternal ante su bebe Essex.
Taylor describió al dibujo como un regalo para su niña. La niña expresó que era “su tatuaje” y que le encantaba. Sin embargo, la respuesta en las redes fue implacable e inesperada para ella y causó furor entre sus seguidores. Solo se encontró con críticas por la elección del dibujo que se realizó en su cara.
Este no es el primer encuentro de Katie con la controversia. Previamente, fue llamada “mala madre” por su extensa colección de tatuajes, que incluyen alrededor de 15 en todo su cuerpo. La joven ya había enfrentado críticas por su apariencia, siendo acusada de parecer “recién salida de la cárcel” debido a tatuajes anteriores.
“Los trolls fueron crueles” expresó la madre ante los comentarios negativos recibidos por parte los usuarios de TikTok. Debido a la situación, confirmó que no tiene pensado tener más tatuajes en la cara, pero expresó que no se arrepiente del hecho y se mantuvo firme en su posición.
En declaraciones a la agencia de noticias SWNS, defendió la importancia de no juzgar a los demás por su apariencia y afirmó que el tatuaje en honor a su hija es su favorito hasta ahora. La joven busca desafiar los estereotipos y quiere ser un ejemplo para su hija, enseñándole la importancia de la individualidad y la libertad de expresión.
La situación ha generado un intenso debate en las redes sociales, con algunos usuarios apoyando la valentía de Taylor para desafiar los estándares establecidos, mientras que otros la critican por lo que consideran una decisión imprudente como madre. “Quiero que mi hija crezca sabiendo que si quiere hacerse un tatuaje o hacer algo por sí misma, podría ir y hacerlo”, insistió Taylor.