El cielo de Osorno, ciudad de Chile, se convirtió en furor luego de que ocurriera un curioso evento celestial. Un fenómeno insólito capturó la atención de los habitantes chilenos, generando una ola de especulaciones sobre la posibilidad de un encuentro extraterrestre.
Las redes sociales se inundaron con imágenes y comentarios asombrados, alimentando la creencia de que un OVNI había llegado a la ciudad de Osorno, en la región de Los Lagos. Sin embargo, la verdad detrás del enigma revela una explicación más terrenal pero igualmente fascinante.
De qué se trata este extraño suceso
Lo que inicialmente parecía un objeto volador no identificado resultó ser una nube lenticular, una formación nubosa que adopta una forma extraña. Puede ser con forma de lente o almendra, muy alargadas y de contornos bien definidos según describió la Organización Meteorológica Mundial (OMM).
El fenómeno a pesar de su rareza, tiene una explicación científica bien fundamentada. Las nubes lenticulares suelen formarse en regiones montañosas, pero Osorno demostró ser una excepción, regalando a sus habitantes un espectáculo visual extraordinario. Se produce como consecuencia de la perturbación de un flujo de aire con un obstáculo montañoso con bajas condiciones de estabilidad atmosférica.
El hecho brindó un espectáculo visual que despertó el interés de quienes lo presenciaron y los testimonios de los vecinos no tardaron en llenar las redes sociales. “Estamos apreciando un objeto no identificado. Es un ovni”, indicaba una mujer que captó el hecho.
“Es muy hermoso” comentó una usuaria sorprendida por el suceso. Tampoco pudo faltar los comentarios de los “internautas expertos”: “Está claro que no es una nube. La absorción y difracción de luz es totalmente diferente a las nubes contiguas. Se asemeja a un plato”.
Aunque la nube lenticular puede parecer fuera de lo común, los expertos meteorológicos explican que se forman por vientos descendentes en las montañas. El aire circula hacia arriba y sobre la montaña, y cuando alcanza la cima, se forma esta peculiar nube. Asimismo, su misterioso aspecto contribuyó a la confusión inicial entre los habitantes.