Verónica Lozano está viva casi de milagro. En febrero se cayó desde una aerosilla frenada a 7 metros de altura, en Aspen, en unas vacaciones invernales que tuvo con amigos y su familia. Hoy está espléndida y muy feliz por su recuperación.
La ex modelo que desde hace bastante se dedica a la conducción se sometió a cirugías reconstructivas de sus talones, en Estados Unidos, y recién ahora pudo volver a pararse con todo el cuidado posible. Tanta es su emoción que lo hizo frente a las cámaras de su programa.
Este martes, en “Cortá por Lozano”, Vero se ayudó con un andador para apoyar sus dos pies y levantarse del sillón. “Hoy volví al Cemic, me hicieron las placas y me pude parar, y di unos pasitos con el andador”, dijo muy contenta en el vivo del ciclo de Telefe.
Y fiel a su estilo, le demostró a todos lo bien que se va recuperando: “¡Estoy recontenta! Es raro. Me duelen mucho los pies abajo. Como todo eso está hecho a nuevo, siento en los talones como puntaditas y estoy muy emocionada”.
Lozano le agradeció a todo el mundo por tanto apoyo: “Les agradezco porque me han apoyado todo el tiempo, han sido muy amorosos. Me ha llegado todos los rezos y el amor. Quiero hacer hincapié en esto y no es que soy ejemplo de nada. Yo la saqué barata, pero hay gente que está en una situación de discapacidad que está muchísimo peor que yo. Me estoy parando, tengo posibilidades de progresar, pero hay algunas personas que no”.
“Lo que uno se propone, bien orientada y con la medicina a favor, la buena voluntad y el amor, se puede lograr un montón de cosas. Y el ánimo, sobre todo”, compartió con sus panelistas y sumó: “Pasaron diez semanas desde que me operé y antes hice mucha rehabilitación, mucha gimnasia y mucha garra. Eso me ha ayudado. No es que salgo caminando. Doy pasitos, tranquila y de a poco”.
Qué le pasó a Vero Lozano
Fue en febrero que Verónica Lozano cayó desde una aerosilla en un centro de esquí de Aspen, Estados Unidos. Debió someterse a una compleja cirugía de talones y hoy ya cumple dos meses y medio de rehabilitación.
Siempre se mostró positiva ante la adversidad y fuerte, lo que la ayuda a recuperarse y a ponerse de pie, literalmente. Lozano sufrió la fractura de ambos tobillos por lo que ingresó al quirófano en Colorado.
“Paciencia, alegría, gratitud, amor”, escribió Vero al verse avanzando día a día. “Fue horrible, un accidente muy espantoso y estoy vida de milagro. El proceso es largo, pero yo le pongo humor y alegría”, confesó apenas ocurrió el suceso.
“Era una silla séxtuple (para seis personas) donde íbamos tres personas: mi instructora, Analía Franchín y yo. Ni bien uno pone la cola en la silla, los bastones se traban, pero falló, entonces en ese momento aviso a quien estaba a cargo para que paren la silla, la gente empieza a gritar y nunca se detuvo”, contó Vero entre lágrimas.
“Fue una secuencia de terror horrible. Nunca me llegó a bajar la barra. Cuando voy a sentarme, levanto el culito para saltar el bastón, pero estaba trabado y quedé colgada. La aerosilla empieza a avanzar y yo quedo agarrada de uno de los fierros de la silla con la mano derecha y del otro lado de agarraba Analía Franchín, y la instructora me agarraba del casco”, relató.
“Sentía que me estaba por morir realmente, veía y escuchaba todo; Anita gritaba y la instructora me decía: ‘Aguantá’. Siento que la virgen me protegió porque estaba en manos de Dios. Gracias a Dios, tengo perseverancia y entrenamiento, sino no sé qué hubiera pasado”.
