Los zoológicos dejaron de ser esos espacios ‘recreativos’ destinados a realizar paseos con fines de distracción o educación y ahora se los vincula claramente con el encierro y la privación de la libertad para especies animales que fueron cazadas y trasladadas de su hábitat natural a lugares hostiles, solo con la intención de ser exhibidos como fruto del exotismo. Ni que hablar de aquellos ejemplares que nacieron en cautiverio.
En gran parte del mundo avanza la idea de cerrar o reconvertir esos espacios y no utilizar a los animales como objetos de atracción turística y económica. Sin embargo, en algunos puntos del planeta la concepción del encierro todavía perdura y generan situaciones lamentables que someten a estos seres vivos a momentos de estrés alarmantes.
Animales enjaulados e imprudencia de turistas
Recientemente se viralizó en distintas redes sociales un video que muestra lo que ocurrió en el zoológico de Kasang Kulim en la provincia de Riau, Indonesia, cuando un turista no respetó el distanciamiento entre una jaula en la que vivía un orangután y lo que se le permite a los visitantes.
Concretamente este turista se aproximó al recinto con fines poco claros y se apoyó con sus manos en los barrotes del enrejado de seguridad. En ese momento, el orangután que vivía allí también estaba contra las rejas y siguiendo con atención los movimientos del sujeto.
Lo que ocurrió segundos después fue pura lógica: el animal lanzó un enérgico manotazo hacia el sujeto y alcanzó a agarrarle la remera, para luego tironearlo contra las rejas. Confundido, el visitante atinó solo a hacerse hacia atrás para intentar contrarrestar la fuerza del ejempla, cosa que fue imposible.
Como si el accidente ya no fuera lo suficientemente dramática, una segunda persona se acercó y comenzó a golpear las manos del orangután para intentar ayudar a la víctima, pero fue infructuoso: el primate alcanzó a agarrar la pierna derecha del desdichado turista y ayudado con una de sus patas lo estrelló contra los barrotes.
La víctima buscó liberarse por todos los medios pero la fuerza que le aplicó el animal fue mayor y terminó por levantar al sujeto, quien quedó en posición horizontal al suelo y suspendido en el aire.
Si bien la grabación llega hasta ese punto, distintos medios informaron que el desprevenido visitante pudo ser liberado y no sufrió más que algunos golpes y un susto formidable.
Los orangutanes son 7 veces más fuertes
Especialistas indicaron al portal británico Mirror que los orangutanes son alrededor de siete veces más fuertes que los humanos y pueden levantar tres veces su peso corporal gracias a sus brazos largos y musculosos.
Se calcula que solo quedan 50 mil orangutanes en estado salvaje después de la destrucción de la jungla en Indonesia y no existen reportes de ataques mortales de esta especie contra el ser humano.