Voldemort es un perro de cuatro años que llegó hace uno y medio a un refugio para mascotas. Fue rescatado por voluntarias de Patitas Glew, un refugio ubicado en Almirante Brown, en la zona Sur del conurbano bonaerense. Las proteccionistas lo rescataron el La Plata, luego de un llamado de las personas que lo habían encontrado.
Pero Voldemort no es un perro como la mayoría: es un galgo al que le falta el hocico. Así fue hallado, con la trompa cortada de un hachazo. Si bien la herida está curada, esta característica le da un aspecto muy particular al animal, lo que hizo que sus salvadores lo bautizaran con el nombre del famoso personaje de Harry Potter, Lord Voldemort, a quien le falta la nariz. La tristeza llega cuando quienes se contactan con Patitas Glew siempre se decidan por otra mascota y no elijan a Voldemort, que hace seis meses está en adopción y todavía no es llevado por ninguna familia.
Desde el refugio comentan: “Los galgos son de esos perros increíbles, que derrochan dulzura y tienen una personalidad única. Sin embargo, en nuestro país muchos de ellos nacieron para sufrir. Los maltratan y explotan hasta que sus cuerpos no dan más y cuando esto sucede los abandonan o sacrifican de la peor forma”.
Voldemort sufrió un hachazo en su cara pero logró ser curado y se fue recuperando poco a poco en el refugio. Una vez que completó su proceso de sanación, iniciaron el proceso de búsqueda de personas que quieran adoptarlo. Sin embargo, todavía no hay interesados.
Aunque el caso de Voldemort es singular, desde Patitas Glew aseguraron que la discriminación que sufren algunos perros a la hora de la adopción es más normal de lo que se cree.
“Notamos gran diferencia entre los perros adultos y cachorros, ya que siempre hacen hincapié en que sean cachorros. Son los que más eligen mientras que muchos perros adultos mueren tal vez, en refugios, esperando una oportunidad que nunca llega”, sostienen. Otra condición que increíblemente influye en las adopciones es el color: “Los perros negros son los que y los que más tardan en conseguir familias, ya sean adultos o cachorros”, afirman.
Patitas Glew es una organización que trabaja en el rescate y cuidado de animales y se sostiene exclusivamente con donaciones y los aportes de sus integrantes.