Independiente Rivadavia tuvo un año que termina siendo correcto, pero que arrancó con la ilusión por las nubes, ya que el ascenso estuvo a dos partidos.
En la primera mitad del año Gabriel Gómez armó un equipo compacto y sólido que llevó a la Lepra hasta las semifinales por el ascenso y donde perdió con Sarmiento de Junín (que luego perdería con Central Córdoba de Santiago del Estero).
Luego de este gran torneo, la dirigencia no pudo retener a Gómez y a varios futbolistas. Por eso salió al mercado de pases para buscar un nuevo DT y refuerzos.
La llegada de Luciano Theiler ilusionó a los hinchas con repetir la campaña anterior, pero los resultados no lo acompañaron y dejó de ser el entrenador azul.
Ya sin promedios, Independiente navegó por la mitad de la tabla de la Zona 1 con buenos y malos partidos, pero ya con alguien de la casa en el banco: Matías Minich.
En el 2020 intentará retener a uno de las figuras que tuvo en este torneo como Gonzalo Klusener (tiene ofertas de la Superliga) y a algunos de los futbolistas que se destacaron como Cristian Aracena.
Será vital el mercado de pases, pero conociendo la economía del club, será fundamental que la dirigencia azul pueda cristalizar alguna venta.