Se vienen las elecciones nacionales y los candidatos redoblan sus esfuerzos por conquistar nuestros votos.
Todos sacan a relucir sus dotes oratorias, su mejor imagen y se esmeran por mejorar su gestualidad, como si fuesen artistas de una obra de teatro en busca del aplauso y la ovación.
Frente a tanta espectacularidad, a nosotros, los votantes, encandilados y fascinados ante semejante despliegue actoral, no nos dejan pensar con claridad y nos inducen a errar en la elección de la mejor propuesta electoral.
De acuerdo a lo antedicho, creo que los mendocinos debiéramos tapar nuestros ojos y oídos a tanta parafernalia y elegir de acuerdo a lo que nuestro sentido común nos dice qué es lo mejor para nuestra provincia y la nación.
Ante tanto palabrerío y colorido despliegue, para evitar la confusión, pido a mis conciudadanos recordemos algunos sabios consejos heredados de nuestros abuelos antes de emitir el voto: “El ave que mejor canta no siempre es la de mejor plumaje” o “aunque la mona se vista de seda, mona queda”.
Creo que con solo apoyarnos en estos dos refranes populares, desecharemos las promesas meramente electoralistas y daremos nuestro apoya al candidato que con honestidad nos diga, cuánto sacrificio deberemos realizar, para recuperar el orgullo de poder decir: “Somos una nueva Argentina, una tierra de paz, progreso y prosperidad”.
Felipe H. Rizzo
DNI 6.889.304