Después de casi siete años trabajando con la selección de Islandia, como asistente y después como entrenador, Heimir Hallgrímsson decidió renunciar a su cargo. Lo confirmó este martes la Federación de fútbol de ese país.
Tras su primera participación mundialista, en la que complicó más de la cuenta a Argentina en el debut, el técnico había dejado abierta la posibilidad de seguir en su cargo. Si bien su contrato finalizaba después de Rusia 2018, los buenos resultados conseguidos en la Eurocopa 2016 y la histórica clasificación al Mundial le daban créditos de sobra como para continuar como DT. Encima Hallgrímsson había asegurado que no había un trabajo en el mundo mejor que ser entrenador de Islandia, lo que daba esperanzas con respecto a su continuidad.
Sin embargo, finalmente tomó la decisión de poner un freno a su carrera como DT, y según publican los medios de su país, tiene pensado retomar su trabajo como dentista.