Hoy la columna está dedicada a las mejores madres del mundo vegetal, las Bromelias. Estas atractivas plantas viven en lugares de suelo escaso, como grietas en las rocas montañosas o en las horquillas de un árbol de la selva.
Cuando alcanzan la mitad de la altura que la planta madre, los hijuelos liberan una toxina que la mata, destinando así el espacio y los nutrientes a las plantas más pequeñas.
Las Bromelias extraen los nutrientes de las micropartículas que se encuentran en el agua que juntan entre sus hojas, que tienen forma de embudo. Florecen a los dos años de vida, esparciendo sus semillas y produciendo, al mismo tiempo, un par de hijuelos a su alrededor.
Una vez que los hijuelos tienen la mitad de la altura que la planta madre, liberan una toxina que mata a la madre, para dejar el espacio y un poco de nutrientes a su descendencia, que replicará a su vez este derrotero natural. Por eso se considera a las Bromelias grandes madres, pues sacrifican su vida para asegurar la continuidad de su estirpe.
Si queremos desafiar a la naturaleza, podemos sacar a sus hijos con raíces antes de que maten la madre. Así le extenderemos la vida por dos años a la planta original y tendremos dos o tres hijuelos que, puestos en macetas, podremos regalar a nuestros amigos esta Navidad.
+ TIPS POR REGIONES
Norte + Consejos para cortar rosas
En estos días surgirán las primeras rosas después de la poda invernal. Al extraerlas, acordate de cortar por debajo de una hoja compuesta de cinco foliolos. Así, incentivarás a la planta para que la rama que crezca de allí en más, tenga en sus extremos una nueva floración para mediados de diciembre.
Centro + Siembra de césped
Ya se pueden sembrar semillas de césped kikuyo o bermuda. Al hacerlo, procurá que nunca se seque por completo el suelo entre un riego y otro: tendrás que regar constantemente hasta obtener un buen porcentaje de germinación.
Patagonia + Riego adicional
No descuides el riego ahora: estamos aproximándonos a la época de altas temperaturas, cuando arbustos y césped comienzan a crecer a mayor velocidad y requieren, por lo tanto, un aporte de agua adicional.
CARTAS DE LECTORES
Josefina y Hugo Herrera, de Rosario, Santa Fe, consultan por una planta que les regalaron: pareciera de la familia de las orquídeas, pero les han dicho que se llama Iris. Quisieran saber cómo cuidarla.
Grimoldi: Josefina y Hugo, quien les dijo que es un Iris está en lo cierto, y podría ser uno del género Neomarica. Pero no es una orquídea. Les comento que los iris requieren mucha luz o sol de mañana, y suelos orgánicos con buen drenaje. Además, son algo sensibles a las heladas intensas.
Beatriz, de Córdoba Capital, envía una foto de un ficus de 2 m de alto que está en maceta. Desde hace unos dos meses está embichado: parecieran ácaros, pero cuando ella mueve la planta, vuelan como maripositas. Ha tratado al ficus con jabón blanco, vinagre, alcohol... pero no logra curarlo.
Grimoldi: Beatriz, el ficus está afectado por la mosca blanca: a las adultas que vuelan, las podés eliminar extrayéndolas con una aspiradora. En las hojas verás que queda una especie de pelusita con los huevos, que nacerán semanalmente: podés sacarlos también con la aspiradora a medida que nacen y se hacen adultos. Si sos constante con esta tarea todas las semanas y no les permitís a la mosca blanca colocar nuevos huevos, algún día se agotará la plaga sin dejar descendencia.
Liliana Beatriz Ontiveros envía la fotografía de una planta de flores blancas y quiere saber su nombre.
Grimoldi: Liliana, la imagen corresponde a una planta denominada popularmente “galán de noche”, que florece en la oscuridad y con exquisito aroma. Es una crasa originaria de las selvas tropicales de Centroamérica y su nombre científico es Epiphyllum oxypetalum.
Carlos Farinelli, de Mendoza, quiere saber si es útil y no perjudicial, dejar las hojas secas, flores y hasta frutos al pie de los jazmines, rosales y olivos. Le han comentado que esto sirve para formar un compost con tierra húmeda y fertilizar cada planta. Desde el año pasado Carlos fertiliza sus olivos con ramas de poda y aceitunas no cosechadas.
Grimoldi: Carlos, lo que hacés es útil, pero supone un gran riesgo porque en esas ramas podrían alojarse huevos de plagas, hongos o esporas, que afectarán mucho a tus plantas si se multiplican en sus bases. Te recomiendo recoger las hojas y restos que comentás, y colocarlos en un compostero, donde al fermentar y elevarse la temperatura, morirán los posibles restos de huevos, hongos y esporas. Una vez maduro el compost, colocalo debajo de las plantas en cuestión. Es una alternativa sin riesgos.
*Guillermo Grimoldi es el especialista en jardinería de revista Rumbos. Contenido especial para Rumbos.