Cuando la novelista británica Constance Savery escribió "Los hermanos enemigos" en 1943, difícilmente pudo imaginar que el título de su libro iba a tener un eco semejante en el mundo del fútbol: los hermanos no sólo se enfrentan entre clubes, sino también con selecciones nacionales. Los hermanos Boateng, Pogba, Cahill y Vieri son algunos ejemplos de jugadores que han decidido tomar direcciones opuestas en sus carreras, representando a países distintos. FIFA.com descubrió a algunos de los futbolistas más famosos que vivieron esa situación tan poco habitual.
Duelos históricos: Prince Boateng padre dejó Ghana en 1981 para cursar estudios universitarios en Alemania. Sus dos hijos, Jérôme y Kevin-Prince, empezaron juntos sus trayectorias profesionales en el Hertha Berlín, pero desde entonces jugaron el uno contra el otro muchas veces en la Bundesliga. Su último enfrentamiento, hasta la fecha, se produjo hace poco, en un encuentro de la sexta jornada. El 23 de junio de 2010, los dos hermanos se cruzaron por primera vez en el panorama internacional, con motivo de un Alemania-Ghana en el Grupo "D" de la Copa Mundial 2010 (Sudáfrica). Jérôme vestía en aquella ocasión la camiseta de la Mannschaft, mientras que Kevin-Prince defendía los colores de las Estrellas Negras.
Antes del partido, que finalizó con victoria 1-0 de los alemanes, Kevin-Prince confesó: “El partido será especial. Pero les prometo algo a los ghaneses: juego para ganar, independientemente de que mi adversario sea mi hermano”. Jérôme, por su parte, hizo gala del mismo entusiasmo: “Vivo en Alemania. Me gustan los habitantes y la mentalidad de este país. La decisión de Kevin es únicamente asunto suyo. Sigue siendo mi hermano, y me alegro por él”.
Del mismo modo que los Boateng se midieron en esa cita, Steve y Parfait Mandanda se vieron las caras en un amistoso entre la Selección B francesa y Congo. Aun así, no llegaron a encontrarse dentro en cancha, ya que Steve defendió la meta europea en el PT y su hermano no entró en juego hasta el segundo tiempo. Finalmente, su decisión de optar por dos selecciones diferentes quizás haya sido positiva, porque ambos se desempeñan como arqueros.
La historia de los Pogba es distinta a la de los Boateng y los Mandanda. Paul comenzó su carrera en Francia, mientras que sus dos hermanos, los gemelos Florentin y Mathias, jugaron juntos en el Celta de Vigo, antes de responder a la llamada del combinado guineano. El pequeño siguió brillando, lo que le permitió fichar por Juventus y ser convocado por primera vez por la selección francesa, para luego llegar en un pase millonario al Manchester United.
Un idioma para varias identidades: El escocés es una de las lenguas regionales de Gran Bretaña, y es distinto al inglés. Esa oposición lingüística parece haberse reflejado en la familia Brown, cuyos tres hermanos, Jim, John y Tom, tuvieron carreras disimiles. Jim, nacido en el país de las Highlands, debutó en Estados Unidos, y formó parte del conjunto de las Barras y Estrellas que alcanzó las semifinales de la edición de 1930 de la cita mundialista, pasando a la historia como el autor del único gol norteamericano contra Argentina. Su hermano menor John, en cambio, compitió con Escocia. Tom, por último, nunca tuvo la ocasión de actuar en el plano internacional, por culpa de la Segunda Guerra Mundial.
La historia nos enseña que los primeros hermanos que jugaron con selecciones distintas son los escoceses John y Archie Goodall. Y, por caprichos del destino, ¡ninguno de los dos pudo representar nunca al país de sus raíces! John nació en Inglaterra, y optó por jugar con los Leones. Su hermano Archie vino al mundo en Belfast, y se decantó por Irlanda. Pero aunque representasen a naciones distintas, los dos vistieron la elástica del Preston North End, que ganó la liga y la FA Cup sin sufrir ni una sola derrota en la temporada 1888/1889. Posteriormente militaron juntos durante un buen número de años en el Derby County.
El delantero Joe Baker jugó con Inglaterra en los ‘60, pero sus padres fuesen escoceses. “Fui el primer futbolista de la liga escocesa que jugaba con la selección inglesa”, recuerda. “Para mí no fue fácil, porque me sentía completamente escocés”. Su hermano mayor, Jerry, tomó una decisión más atrevida si cabe al atravesar el Atlántico para enfundarse el uniforme de Estados Unidos, con el que disputó el Mundial de 1970.
En el hemisferio sur, el australiano Tim Cahill se hizo famoso por las danzas tradicionales con las que celebra sus goles. El exEverton explica que se inspira en el folclore de Samoa, el país de origen de su madre, y al que representó su hermano Chris en la competición preliminar del Mundial 2010.
En los Socceroos, Cahill coincidió con Massimiliano Vieri, que ganó la Copa de Naciones de la OFC 2004. Sin embargo, este delantero nunca alcanzó en popularidad a su hermano mayor, Christian, que disputó dos Mundiales con Italia. El antiguo artillero del Inter conquistó numerosos títulos durante su larga trayectoria en Europa. “Somos dos hermanos que juegan en dos selecciones distintas”, decía Massimiliano. “Es raro, ¿no? Espero que algún día juguemos el uno contra el otro”.
Hermanos a pesar de todo: Los Baker y Vieri distan de ser los únicos que jugaron en continentes distintos. Michele Andreolo representó a Italia en el Mundial de 1938, en tanto que su hermano Raimondo jugó muchos partidos con Uruguay. Roy Wegerle se distinguió con Estados Unidos, y dejó a su hermano Steve encargado de representar a Sudáfrica. Royston Drenthe suma una internacionalidad con Holanda, mientras su hermano Giovanni optó por Surinam. Por último, José Luís Vidigal respondió a la llamada de Portugal, al contrario que sus hermanos Lito y Jorge Filipe, que prefirieron ir con Angola.
El caso de Sone Aluko y su hermana Eniola es único. Esta última representó a Inglaterra en 2 ocasiones en la Copa Mundial Femenina, y también en los JJ.OO de Londres 2012. Y su hermano se estrenó con Nigeria en 2009.
¿Quedará en una idea?
La FIFA se plantearon revisar y flexibilizar la normativa que permite a un jugador con doble nacionalidad cambiar de selección. La razón se debe a una propuesta que sugiere dar la oportunidad de cambiar de seleccionado a jugadores que sólo hayan disputado uno o dos juegos oficiales con un equipo nacional mayor. Así lo reconoció el canadiense Victor Montagliani, miembro del Consejo fifista: “El mundo cambió. Hay problemas de nacionalidad que están apareciendo en África, Asia y en la Concacaf. Es un buen momento para revisar esto y ver si hay soluciones sin dañar la integridad del juego”.
Normativa actual: Permiten a los jugadores con doble nacionalidad cambiar de selección siempre que no hayan jugado un partido oficial con la mayor y que ya tuvieran la nacionalidad del nuevo país con el que quieren jugar cuando debutaron con la primera selección. Esta situación es la que se amparó, por ejemplo, Diego Costa, que actuó en las juveniles de Brasil y que después optó por España.
Algunos casos: Florent Malouda no es el primer futbolista que jugó con dos selecciones distintas. Lo hizo en la Copa de Oro de la Concacaf (2017), para Guayana Francesa. El volante participó de dos mundiales con Francia (Alemania 2006 y Sudáfrica 2010). Sin embargo el Malouda no fue el único futbolista que ha jugado con dos selecciones nacionales. Aquí una lista de jugadores que han representado a dos naciones:
El jugador del Atlético Madrid, Diego Costa, nació en Brasil y se naturalizó Español, sus buenas actuaciones en la temporada 2012-2013 llamaron la atención de la selección brasileña por lo que fue convocado y disputó dos partidos amistosos, pero al no ser oficiales en el 2014 fue llamado con Vicente Del Bosque para formar parte del combinado español con el que en ese mismo año disputó el Mundial de Brasil.
El futbolista brasileño fue convocado con la selección de su país sub 23 para participar en la Copa Oro 2003. Sin embargo al tener la doble nacionalidad y no haber jugado con la selección mayor de Brasil, Thiago Motta declaró estar disponible para jugar con la escuadra italiana, en donde logró hacerlo en el año 2011. Además, el estadounidense Jemaine Jones disputó varios encuentros con las juveniles alemanas, pero después de no ser tenido en cuenta con la mayor, en 2009 decidió representar a la selección de las barras y las estrellas.
Por su lado, Edgar Castillo, nacido en Nuevo México pero de padres mexicanos, después de haber tenido buenos momentos cuando militaba en Santos Laguna llegó a ser llamado en varias ocasiones con la selección mexicana para disputar amistosos, sin embargo en 2009 empezó a representar al conjunto estadounidense. Por último, Alfredo Di Stefano nació en Buenos Aires, pero se naturalizó Español y es considerado uno de los mejores futbolistas de todos los tiempos. Se une a la curiosa lista de los jugadores que jugaron con dos selecciones distintas, en este caso el legendario jugador disputó seis partidos con la selección Argentina en tanto que con España jugó treinta y un duelos.