“El año pasado, entre el 20 de marzo al 1 de junio 2019, murieron en las rutas 984 personas, mientras que este año desde el comienzo del aislamiento social, preventivo y obligatorio, la cifra bajó a 251, lo que implica un descenso del 80 por ciento”, afirmó el director ejecutivo de la Agencia Nacional de Seguridad Vial, Pablo Martínez Carignano.
A esto se le suma la reducción de la cantidad de camas en terapia intensiva ocupadas por incidentes de tránsito. En este sentido, Martínez Carignano destacó que “la incidencia que tienen los siniestros viales en el sistema de salud es enorme y esto en esta época de pandemia y aislamiento quedó evidenciado”.
Si bien esta disminución está relacionada con una merma en la circulación dado el contexto, para el director ejecutivo de la Agencia Nacional de Seguridad Vial la respuesta a la pandemia puede dejar una lección en la importancia de seguir las medidas de prevención. “Sería buenísimo que todos entendamos que ponernos el cinturón de seguridad, usar el casco en la moto y no tomar alcohol antes de subirnos a un vehículo, hace que la probabilidad de que suframos un siniestro vial baje muchísimo”.
Sobre el uso del casco, aclaró que éste debe estar bien abrochado y que tiene una fecha de vencimiento que hay que controlar. Además, “si tuviste algún siniestro con moto y el casco se golpeó, hay que cambiarlo porque puede haber microfisuras y en caso de volver a chocar, ya no te protege”, advirtió.
Martínez Carignano también reconoció el trabajo esencial de camioneros y transportistas durante la pandemia “que han recorrido el país abasteciendo a los pueblos”. Además recomendó que “se sigan cuidando, que se laven las manos con frecuencia, usen barbijo y que a donde vayan los reciban como corresponde porque son los que se la están jugando en este tiempo tan difícil”.