Con el afán de fusionar sus paisajes, los mejores varietales y la experiencia de compartir en familia, el restaurante de Agostino se renovó y para celebrarlo invitó a prensa local y creadores de contenido a disfrutar de un día completo de experiencias.
Fueron los periodistas: Marcelo López, Federico Croce, Paula Crombas y Alicia Sisteró, junto a los creadores de contenido Giuliana Panella, Nina Caram, Flor Dibatista, Muriel del Barco, Rosario Díaz Araujo y Luca Salvo los que disfrutaron de un fun day que incluyó degustación y recorrido por los viñedos, visita a la casa de huéspedes y degustación de platos en el nuevo restaurante.
“En esta nueva propuesta gastronómica dejamos de lado los emblemáticos pasos que encontramos en las bodegas y creamos un menú para compartir que posee: dos antipasto, una pasta y un plato principal con postre”, confesó Edward Holloway, el chef irlandés responsable de este proyecto y agregó:
“Se trata de un espacio distinto y muy especial. Donde el concepto resulta totalmente disruptivo respecto a los menúes de bodegas a los cuales estamos acostumbrados. Porque el objetivo principal fue, justamente, crear un espacio dedicado a la familia y a los amigos, donde se pueda disfrutar de una buena comida de forma descontracturada, acompañada de los mejores vinos”, contó el chef irlandés Edward Holloway, quien lidera este proyecto.
“Para ello, nos inspiramos en las raíces italianas de la familia Agostino y tuvimos en cuenta la experiencia de unión y disfrute en familia”, agregó.
Según indicó Irene Ouet -responsable de marketing de Agostino- esta renovación del espacio, de la mano de Morgán Milia -arquitectura y diseño-, logró un clima hogareño con una ambientación con mesas grandes y platos para compartir. Es que justamente, según advirtió el chef a cargo del mismo: “Es lo que se buscó lograr. Que los mendocinos y turistas cuenten con una opción de bodega más disruptiva. Con la intención de volver a las raíces de la comida familiar, de la olla que sale de la cocina y llega a la mesa y se sirve”.
“Salir de una estructura de muchos pasos a una cosa mucho más descontracturada, de compartir comida en el medio de la mesa y disfrutar toda esta comida con los buenos vinos de una forma muy relajada”, concluyó.
Por su parte, la responsable de turismo de Agostino; Mariana Encina, adelantó los varietales que los comensales pueden disfrutar: “En Agostino, tenemos una gran variedad de uvas, de varietales y dos terroir tan distintos entre ellos, que es Barrancas y Valle de Uco - está en la parte del Cepillo, esa finca se llama Finca La Serafina, donde a través de 17 varietales de uvas podemos llegar a tener diversos estilos de vinos que van a acompañar perfectamente también con los platos de Edward en esta nueva propuesta de Agostino Restaurante”.
“La idea siempre es fusionar la frescura. Esta amabilidad en vinos, la acidez que nos otorga Barrancas, y Valle de Uco siempre aportando un poco la complejidad, una fruta más madura para aquellos vinos premium, especiales para lograr captar a cada uno de los consumidores que hoy tenemos aquí en nuestra bodega”, añadió.
Es así como Agostino se prepará para la temporada y suma el servicio de eventos. “Estamos listos para recibir grupos más grandes. Por eso estamos desarrollando una serie de productos para casamientos y eventos corporativos para aprovechar la buena gastronomía, la infraestructura que tenemos y ese gran paisaje”, cerró Holloway.
Casa Agostino
Casa Agostino cuenta una historia de la que actualmente pueden disfrutar los mendocinos. Es que los cuatro hermanos: Vincenzo, Rosalía, Sebastián y Miguel Agostino, quienes vivieron su niñez en Mendoza y luego emigraron a Canadá, siempre mantuvieron la esperanza de regresar a la provincia. Por eso, la familia regresó a Mendoza con un ambicioso proyecto, construir una bodega y elaborar vinos de terroir. Así fue que en 2003 construyen Agostino en Barrancas, Maipú.
Cuando los cuatro llegaron a Barrancas idearon también una casona para descansar junto a la bodega que construyeron con su impronta y experiencia en el rubro inmobiliario. Ya que los Agostino poseen una de las empresa constructoras más grande de Canadá.
Hoy Casa Agostino se convirtió en su primer proyecto hotelero, donde se invita al huésped a vivir la experiencia como un bodeguero y ahora suma su propuesta gastronómica. El restaurante abre todos los mediodías y allí se pueden degustar platos elaborados con ingredientes cultivados en la propia huerta y maridados con los vinos de la bodega.
A su vez, tras su amor por la arquitectura, en 2018, la familia también adquirió la bodega Alfa Crux ubicada en El Cepillo, Valle de Uco. Alfa Crux también cuenta con un restaurante en medio de los viñedos, Crux Cocina, abierto todos los días para almuerzos, degustaciones y donde reciben a cientos de visitantes cada año.
Contacto
Carril Barrancas 10590, Maipú, Mendoza, Argentina