El martes pasado comenzó la campaña de vacunación contra el coronavirus en Argentina, tras la aplicación de la vacuna Sputnik V, que el Gobierno nacional trajo desde Rusia, con la esperanza de poder controlar la vara de contagios en el país.
Sin embargo, como era de esperarse algunos inoculados ya presentaron síntomas adversos. Este viernes, desde el Ministerio de Salud de la Nación comunicaron que se han notificado, hasta las 23.59 hs del 30 de diciembre del 2020, al Sistema Integrado de Información Sanitaria de Argentina (SIISA) 317 efectos adversos (ESAVI) posteriores a la vacunación tras la aplicación de 32.013 dosis reportadas en el Registro Federal de Vacunación Nominalizado (NoMiVac).
El 44,2% de los ESAVI reportados corresponden a personas con fiebre, cefalea y/o mialgias iniciadas 6 a 8 horas después de la vacunación.
Cabe destacar que, dentro de las reacciones esperables, se pueden presentar dolor en el sitio de la inyección, hiperemia e hinchazón.
También el paciente puede presentar reacciones sistémicas, es decir, síndrome pseudogripal corta duración, que inicie dentro de las 24 a 48 horas de la colocación, que pueden ser escalofríos, fiebre, artralgia, mialgia, astenia, malestar general, cefalea.
Existen, además, otros síntomas que son menos frecuentes, pero no inexistentes: los gastrointestinales (náuseas, dispepsia, disminución del apetito). Estas reacciones tienen una duración promedio de 24 hs.
Desde el Gobierno informaron que 18 de las 24 jurisdicciones han notificado efectos adversos al SIISA. El 99,3% de los reportados fueron leves y moderados, que no requirieron hospitalización y evolucionaron con recuperación completa.