La nueva Jeep Gladiator se produce en Toledo, en el estado de Ohio, Estados Unidos. Es un hecho muy significativo que venga de allí, justo en el año en que esta marca precursora de los vehículos 4x4 cumple 80 años, porque en esa misma planta industrial nacía el Willys, el primer Jeep, en 1941.
La historia de Jeep también está muy vinculada a historia de la industria automotriz argentina. El primer vehículo que fabricó IKA (Industrias Kaiser Argentina), en la planta que actualmente pertenece a Renault, en Santa Isabel, Córdoba, fue un Jeep: una edición “civilizada” del Willys. Y también la pickup Gladiator se produjo en esa fábrica, desde 1963 hasta 1977. Muy recordada por su “pinta”, pero también porque fue la primera pickup mediana con tracción 4x4.
Esta nueva edición de la Gladiator poco tiene que ver con aquella pickup de los 60 y 70. Ahora está basada en el Jeep Wrangler (el modelo que, aun siendo ultramoderno y tecnológico, sigue las líneas estéticas del Willys) y fue pensada como una pickup preparada para el off road más extremo.
Cuando comience a ser comercializada (según fuentes de FCA, ahora Grupo Stellantis, sobre fines de este mes de abril), no solo se convertirá en la pickup más apropiada para “salirse del camino”, sino que además será la más potente del mercado, desplazando a la actual Volkswagen Amarok V6, de 258 CV. La Gladiator llevará el motor Pentastar V6 3.6 naftero (el mismo que trae el Wrangler), que consigue 285 caballos de potencia y 353 Nm de Torque. Solo se ofrecerá con una caja automática de ocho velocidades y tracción 4×4 desconectable y con reductora (conocida como caja de fuerza o baja).
La legendaria capacidad de Jeep se consigue gracias a los sistemas 4x4 Command-Trac y Rock-Trac, la tercera generación de los ejes Dana 44, los diferenciales con bloqueo electrónico delantero y trasero Tru-Lok, el diferencial de deslizamiento limitado Trac-Lok, exclusiva barra estabilizadora que se desconecta electrónicamente y neumáticos todoterreno de 33 pulgadas (llantas de 17 pulgadas).
Además, su estructura le permite trepar entre rocas y obstáculos mejor que cualquier otra pickup. Esto lo reflejan sus ángulos de ataque (43.6 grado, ventral (20.3°) y de salida (26°); más una distancia al suelo o despeje de 28,2 centímetros. Su capacidad de vadeo (hasta dónde puede hundirse en el agua) es de 76,2 centímetros. Será la más potente, la más off road y probablemente la más atractiva, pero también la más cara. Más allá de su tecnología, lo será también porque tributará el 35% de arancel aduanero al venir importada de Estados Unidos. Sin embargo, seguramente resultará un poco más accesible que el Wrangler, ya que la Gladiator estará exenta de impuestos internos (conocido como impuesto a los autos de lujo), porque las pickups son utilitarios y éstos no pagan ese impuesto.
La web de Jeep Argentina informa que la Gladiator se ofrecerá con dos niveles de equipamiento: Overland y Rubicon. La capacidad de la caja de carga declarada oscila entre 550 y 615, según la versión. Y la versión Rubicon incluye techo rígido y de lona desmontables, lo cual la convierte también (y seguimos sumando originalidades) en la única pickup descapotable de la Argentina.
Los precios de la Gladiator se conocerán al momento de su lanzamiento, pero para ir “asustándolos” un poco, los precios del Jeep Wrangler en la Argentina hoy son: Rubicon 3 Puertas, 101.500 dólares; Sahara Unlimited, 107.100 dólares; Rubicon Unlimited, 109.200 dólares.
La seguridad y protección de los ocupantes han sido aspectos primordiales a la hora de desarrollar el nuevo Jeep Gladiator, lo cual queda reflejado en los más de 80 componentes de seguridad activa y pasiva disponibles. Entre ellos se incluyen monitoreo de punto ciego, sensor de ruta transversal de reversa (Rear Cross Path), cámara todoterreno delantera, cámara trasera ParkView con líneas de cuadrícula dinámicas, control de crucero adaptativo y control electrónico de estabilidad ESP, con mitigación electrónica antivuelco.
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