El triunfo de la Selección Argentina sobre Croacia por 3 a 0 hizo delirar a los argentinos a lo largo y ancho de todo el país y celebraron el paso a la final del Mundial de Catar-2022.
La euforia se transformó en multitudinaria manifestación que bajó como una marea en el centro de Buenos Aires. Llegaron a pie, en autos, en Subte, en colectivos con gente colgada de los techos hasta rodear al Obelisco y armar un carnaval en la Avenida 9 de Julio.
Los bocinazos, las trompetas y los tamboriles se acallaban cuando decenas de miles de jóvenes cantaban a coro el hit mundialista: “Y al Dieeeeego, en el cielo lo podemos veeeeeer, con don Diego y con la Toooota, alentándolo a Lionel”.
“Este Mundial lo sentimos como nunca. Por la muerte de Diego y porque es el último de Messi”, explicó a la AFP un desempleado, Ramiro Monteiro. Pablo Cardozo, jubilado de 74 años, se plantó frente a las pantallas y gritó: “¡Ganamoos, te quiero Argentinaaaa!”, en arenga a los más jóvenes de la cafetería que lo aplaudían por su energía y compromiso.
“¡Amo a Julián!”, dijo conmovida Emilia Salvo, de 23 años. “No puedo más de la excitación ¡Esto es un sueño!”, expresó Gabriela Perdiguez (26). “Era un partido re-duro. Son dos grandes selecciones. Me encantó Julián, que la rompió”, analizó Delfina Yacoy (22).
La locura albiceleste es contagiosa. En Mar del Plata se reunieron miles flameando banderas y sombreritos de arlequín frente a una pantalla gigante. No hay rincón del país donde no se palpitara la semifinal.
En medio de la pasión y la tensión, el historiador Felipe Pigna le señala a la AFP: “Messi entró en el corazón de los hinchas. Es una persona muy querible y demostró dotes de caudillo. Se puso al hombro al equipo”.
“Las bromas y cruces que tuvo con Países Bajos son picantes y son las que le gustan tanto al hincha argentino, lleguemos a donde lleguemos en el Mundial. Lo de vulgar (aquel “¿Qué mirás bobo?” a un rival) es un elogio. Es absolutamente popular”, dijo.
Los festejos se replicaron en todo el país. Los argentinos salieron a festejar el paso a la final del Mundial de Qatar embanderados con los colores de la insignia nacional.