La mayoría de las personas se bañan una vez al día o hay varios que lo hacen más veces ya que hacen deportes o se mueren de calor cuando las temperaturas son altas. Y la pregunta de hoy... ¿es realmente necesario muchas veces?
La Academia Estadounidense de Dermatología le aconseja a los padres de niños pequeños la frecuencia con que deberían bañarlos, basándose en cuán sucios están. Si no es demasiado, y el pequeño tiene entre 6 y 11 años, se les recomienda bañarlos al menos una o dos veces por semana. Y es que sus sistemas inmunológicos en desarrollo necesitan organismos como bacterias y pequeñas dosis de virus e infecciones para crecer fuerte.
Además, las duchas quitan la humedad de la piel ya que al usar jabón se elimina la suciedad y también el aceite de la piel. El shampoo remueve el aceite esencial o sebo del pelo por lo que se recomienda lavarlo una vez cada dos o tres días.
Así es que si la pérdida de aceite natural se combina con un lavado riguroso y agua muy caliente durante bastante tiempo, se convierte en una receta para resecar la piel.
Para mantener una piel saludable se aconseja no usar agua demasiado caliente, no permanecer más de 30 minutos e hidratar el cuerpo apenas se sale del baño ya que la loción con la piel todavía húmeda puede bloquear el escape de humedad de la dermis.
Vale resaltar que, según estudios, bañarse cada dos días es probablemente suficiente, siempre y cuando la gente que tengas alrededor te pida por favor que te higienices.