Incertidumbre, tristeza y enojo son las emociones que reinan en la, ahora, ex escuela Juan Agustín Maza de Ciudad. La institución, ubicada en calle Garibaldi, cerró sus puertas tras más de 90 años de actividad. Esta medida tomó completamente desprevenidos a docentes, padres, alumnos y personal administrativo.
Gustavo Amstutz, dueño del colegio, en la mañana de este jueves llegó con una nota firmada por escribanos que decía que el edificio cerraba hoy mismo. Allí explicó que el motivo del cierre se debía a que “la cantidad de padres que pagan la cuota no es la suficiente”.
Mientras las autoridades tenían una reunión informativa con los profesores y empleados, comenzaron a arribar padres auto convocados, los cuales pudieron acceder al recinto gracias a que los estudiantes les abrieron las puertas de lugar. Una vez dentro, pidieron explicaciones a Amstutz, el cual, según el testimonio de los presentes, no brindó declaraciones convincentes.
“Nos enteramos por los chicos que la escuela cerraba y es un hecho. Los profesores, celadores y empleados se quedaron sin puestos de trabajo y los niños sin poder estudiar”, dijo Yaquelina, una mamá que se encontraba en la puerta del colegio. Además, comentó que “mi hijo va a tercer años y a esta altura del ciclo no sabemos dónde vamos a conseguir banco”.
“Es una falta de respeto hacia los chicos. Nosotros veníamos con la cuota al día y ahora no sabemos qué va a pasar”, agregó Cristina, madre de otro alumno.
50 personas se quedaron sin trabajo
En el colegio trabajaban alrededor de 50 personas, entre docentes y personal administrativo. Entre ellas se encuentra Joel, el cual se desempeñaba como Secretario Académico. El joven de 31 años explicó a Los Andes, que “no recibimos notificación previa por parte de los dueños del colegio. Nos fuimos enterando por rumores, no se sabía si en julio o en agosto iban a cerrar hasta que intervino la Supervisora de un Área. Ella nos dio la información porque vio que la gente encargada de notificarnos no lo estaba haciendo”.
“Es decir que -agrega - nosotros nos fuimos enterando de la fecha de cierre por personas ajenas a la institución. Una vez que tuvimos el día estimativo empezamos a pedir reuniones con el dueño pero no recibimos respuesta”, comentó Joel.
“Problemas de firmas”
La DGE citó a los padres de alumnos a una reunión que tendrá lugar el próximo lunes y martes en la misma escuela. “La Supervisora avisó que los chicos tienen un lugar adonde ir, estaban buscando banco previamente porque veían que esta situación iba a darse tarde o temprano”, dijo Joel.
Con respecto a la falta de fondos, “esta escuela recibía aporte estatal, de hecho, la Dirección General de Escuelas ya había depositado el dinero en el banco, el cual está frenado por la situación judicial del mismo dueño. Hay incluso problemas de firmas”, explicó el joven.
Asimismo comentó que al personal del colegio le deben el aguinaldo y el sueldo correspondiente al mes de junio. “No hay expectativas de que se cobre”. “El problema es que estamos en la calle, no hubo preaviso que correspondería en estos casos”, explicó el ex Secretario Académico.
Testimonio de estudiantes
Pedro, de 16 años, es uno de los 160 alumnos que se quedaron sin colegio. El menor comentó la situación que vivió en la mañana del jueves: “Fue muy repentino, en el grupo de WhatsApp de la escuela nos llegó un mensaje que decía, ´el jueves se tienen que presentar porque se va a cerrar la escuela´. No sabemos dónde vamos a ir, nos dejaron en la nada”. Además, agregó que “mi papá está de viaje, yo estoy solo y no sé qué voy a hacer”.