El valle de Uspallata, a escasos kilómetros de la alta montaña mendocina, posee bellos y mágicos sitios para conocer. Uno de ellos es el cerro Tunduqueral. Para llegar, se debe ir por la ruta 52 –que conduce a Paramillos y Villavicencio– desde la villa de Uspallata.
Luego de transitar por el ingreso a Las Bóvedas, con una extensa alameda hacia ambos lados del camino y la famosa piedra energética del lado norte, se llega tras andar menos de 10 km al ingreso al cerro. Hay que dejar el vehículo sobre la ruta 52 para comenzar una caminata por un sendero que a los pocos minutos conduce a un grupo de cerros.
El paseo no lleva más de dos horas y media, pero, seguramente, el caminante se detendrá por varios minutos para observar en el cerro que está más al sur los petroglifos, unos grabados sobre una gran piedra. Se trata de figuras humanas y otras representaciones que fueron inmortalizadas con un elemento de percusión en épocas precolombinas. Se piensa que esta pieza de arte rupestre de más de 400 figuras tienen más de mil años, y la zona fue un sitio muy importante desde el punto de vista espiritual de aquellas poblaciones originarias de estas tierras.
La web Pueblos Originarios destaca que investigaciones de Juan Schobinger “demostraron la presencia en la zona de grupos agroalfareros provenientes del norte. El cerro presenta tres picos piramidales, en el sur se concentra el grupo principal de petroglifos de más de 1.000 años de antigüedad, con variadas representaciones especialmente antropomorfas”.
También señala que los antiguos pobladores y los incas lo consideraron sagrado y que el lugar era utilizado en ceremonias femeninas: las representaciones estarían vinculadas a la historia y el rol de la mujer en la sociedad, todas las niñas que comenzaban a ser mujeres debían ingresar al sitio.
Diego Martín Ortiz, guía de Turismo del municipio de Las Heras, comenta que toda la zona tiene esa mística energética y de alto valor patrimonial, arqueológico y cultural. Menciona, entre otros sitios, el bosque petrificado de araucarias en Paramillos (Agua de la Zorra), que Charles Darwin describe en sus investigaciones en su paso por Mendoza.
Sobre el cerro Tunduqueral explica que el nombre se debe a que es un sector habitado por tunduques, roedores que habitan en gran parte de la provincia. Diego cuenta que el recorrido es de unos dos kilómetros y medio y se puede realizar todos los días: “Está abierto al público de 10 a 17, allí está Walter, quien se encarga de las visitas, de todas maneras es importante pasar primero por el informador turístico de Uspallata”.
Rodrigo Pérez Esquembre, director de Turismo de Las Heras, explica que el municipio realiza visitas periódicas al cerro. “La última actividad fue una star party, a principios de abril en el marco del programa de astroturismo y la intención es continuar con este tipo de actividades abiertas a los mendocinos y turistas en general que quieren conocer este museo a cielo abierto”. Y afirma: “Senderismo, bici tour, astroturismo (Star Party), yoga son algunas de las actividades de este programa que promociona el disfrute al aire libre, la difusión del patrimonio y el cuidado del ambiente”.
También comenta que se ha colocado cartelería e información útil para que el visitante interprete lo que está viendo. Y una pasarela de prevención y protección del patrimonio arqueológico. También resalta que desde la provincia, junto con la UNCuyo y la de San Luis se trabaja en un proyecto de rescate patrimonial y conservación del Cerro Tunduqueral. Cabe aclarar que forma parte del Sistema Vial Andino, declarado Patrimonio de la Humanidad, en el año 2013.
Conservación e imágenes 3D
Horacio Chiavazza, director de Patrimonio Cultural y Museos del Ministerio de Cultura y Turismo de Mendoza, señala la importancia del trabajo colaborativo en este tipo de proyecto. “El Cerro Tunduqueral es un sitio emblemático del pasado prehispánico regional y es de interés de la Dirección Provincial de Patrimonio trabajar en aspectos vinculados a su conservación, pero sobre todo a la investigación y conocimiento que se puede obtener”, asegura.
El proyecto, que cuenta con el financiamiento del ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación de la Nación, no sólo tiene valor en tanto a la conservación de patrimonio y comunicación, sino que el registro visual del Cerro Tunduqueral será trasladado a un sistema virtual en 3D, que se utilizará para difundir a la comunidad estos espacios con arte rupestre. De la Universidad de San Luis, Guillermo Heider, doctor en Arqueología y director del proyecto, señala que están haciendo “un relevamiento en tres dimensiones, dos cámaras de alta calidad, para relevar los paneles y micrófonos de ambiente, porque en definitiva lo que nosotros intentamos es volver al sitio en el estado prehispánico. Entonces necesitamos tener el mejor detalle de imágenes para hacer la reconstrucción luego en el laboratorio”. Y agrega que el proyecto “propone hacer realidad virtual para el sitio y presentarlo en los museos de la ciudad”.
Por su parte, Eric Marsh, doctor en Arqueología e investigador, destaca: “Desde hace algunos años estamos acá con un equipo grande investigando, alrededor del cerro, para entender un poco más a las personas, a la gente que hizo este arte rupestre. Al lado del sitio también tenemos un alero y evidencias en superficie de que acá la gente vivía y también hacía arte”.
Info
En la app Ruta 52 se obtiene información sobre los sitios. La cartelería de cada lugar cuenta una reseña histórica, su ubicación, fauna y flora predominante, recomendaciones y cuidados, contactos de emergencia, se logra apreciar un Código QR que al escanearlo redirige a la cuenta oficial de Instagram (@lasherasturismo).