Científicos argentinos revelaron que se registró el nacimiento de un caballo genéticamente igual al ejemplar que le dio origen, pero del sexo puesto. Se trata de la primera vez en la historia que se descubre esto, según publicaron en la revista Plos One. Allí también explicaron que se debió a una pérdida espontánea del cromosoma Y, cromosoma sexual exclusivo de los machos.
Los especialistas detallaron, además, que se trataría de una situación imprevista de estrés que enfrentó el cultivo del tejido para obtener el ADN de las células del macho que se clonó. Pese al cambio de sexo, explicaron que eso no le quita la cualidad de clon.
Gabriel Vichera, cofundador y director científico del laboratorio en el que se realizó el procedimiento, lo afirmó en diálogo con la Agencia CyTA-Leloir: “Un clon es un individuo con el mismo genoma que otro, que se genera a partir de una reproducción asexual y tiene como origen una única célula. La yegua de la que hablamos entra absolutamente en toda esa definición; no tiene un genoma diferente, sino ausencia de una parte”.
El director de Kheiron Biotech agregó que “el estudio genético de filiación que realizamos en la Sociedad Rural dio que la yegua es igual al individuo a partir del que se gestó y también a su gemelo, un potro que nació junto a ella”.
De esta manera, los científicos confirmaron que se trataba de un clon con cambio de sexo, algo que según reconocieron, no habían conocido en 20 años de experiencia. “Es realmente muy insólito. A partir de lo ocurrido buscamos literatura sobre el tema y encontramos casos aislados en ratones, lobos y perros. Pero no hay antecedentes en caballos”, dijo Vichera al respecto.
El especialista manifestó creer que la pérdida del cromosoma “tiene que haber ocurrido en el cultivo del tejido del animal original, aunque en los análisis que hicimos no logramos detectar que haya sido así”. Y añadió: “Sí pudimos saber que esas células no estuvieron en condiciones adecuadas en cuanto a temperatura y atmósfera, algo que puede generar estrés a un cultivo celular y producir una variabilidad en la composición cromosómica”.
En la actualidad, la yegua clon tiene dos años y no presenta anormalidades, e incluso unas ecografías permitieron corroborar sus órganos reproductivos.
“Comprobamos que tiene útero y ovarios, aunque para su edad éstos no están lo suficientemente desarrollados. Hay que esperar y ver cómo evolucionan en el tiempo, pero suponemos que puede ser infértil por los medios convencionales de reproducción sexual”, expresó el biotecnólogo y doctor en Ciencias Agropecuarias.