Cientos de mendocinos homenajearon este 25 de julio al Santo Patrono Santiago con una celebración religiosa que se conmemora anualmente desde 1575, según se tiene registro. El Arzobispado de Mendoza planeó una serie de actividades que arrancaron el domingo y siguieron este lunes, con la tradicional Misa y procesión en la Peatonal Sarmiento. El Obispo de Mendoza, Padre Marcelo Colombo, explicó quién fue el apóstol y pidió protección por “los feroces sismos que hoy nos afligen como sociedad”.
Los fieles aprovecharon el día para salir a las calles a venerar al Santo, protector de Mendoza, ya que es feriado provincial por la creencia popular de que el día del patrono no se debe trabajar porque, sino, tiembla. Por eso y según se sostiene, Santiago Apóstol es el protector de los “movimientos telúricos”
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Y si bien no hubo registro de ello durante este lunes, sí se movió el suelo el domingo a las 16:43, momento en el que se registró un sismo de magnitud 4.1 en la escala de Richter. Según informó el Instituto Nacional de Prevención Sísmica, el epicentro fue en Tupungato.
Las celebraciones comenzaron hace una semana, con una novena que se realizó entre el 16 y el 24 de julio y la imposición del escapulario a la Virgen del Carmen. El domingo a las 21 se realizó además la Gala de Santiago en el teatro Independencia, que llevó por lema “Con Santiago Apóstol juntos caminamos en verdad, amistad y esperanza”.
Pero las actividades centrales fueron este lunes, con centro neurálgico en la Iglesia de Santiago Apóstol y la Peatonal, frente a ella, en la Ciudad de Mendoza. Se realizaron misas, patio de comidas, espectáculos artísticos, confesiones y procesión; todo organizado por la parroquia con el aval del Arzobispado de Mendoza.
Los distintos momentos de encuentro y oración tuvieron un sentido especial ya que se volvió a celebrar presencialmente el día del Patrono de Mendoza después de dos años, tiempo en el que todo se realizó de manera virtual por la pandemia.
LA HOMILÍA DE MONS. COLOMBO
La homilía tradicional del Obispo P. Marcelo Colombo no fue la excepción, ya que el arzobispo pudo volver a predicar cara a cara con los fieles en la Misa de la Solemnidad de Santiago Apóstol, la cual ocurrió desde las 15 y previo al inicio de la procesión.
Allí, el máximo referente de la Iglesia Católica en Mendoza aprovechó para recordar y enseñar quién fue Santiago Apóstol: “Sabemos que es el hermano de Juan y se le presenta como alguien importante dentro del grupo apostólico, detrás de Pedro, generalmente. Así podemos encontrarlo en momentos muy especiales de la vida de Jesús”.
El Patrono de Mendoza es uno de los dos “Santiago” que hay en el Evangelio, por lo que es conocido como “Santiago El Mayor”, el hijo de Zebedeo: “No se trata de una cuestión de altura, de edad o de santidad, sino de la responsabilidad que le asignan los textos bíblicos, especialmente durante la vida terrena de Jesús”, explicó Monseñor Colombo.
Entre otras, comentó que “Santiago fue el primero de los apóstoles en beber el cáliz que Jesús bebió”, y que lo acompañó en momentos claves como en su Transfiguración y en el huerto de Getsemaní, “cuando el Señor ora al Padre en la inminencia de su arresto”.
Posteriormente, y ya que “tantas veces asociamos a Santiago con los movimientos sísmicos y su presencia protectora”, el arzobispo aprovechó la celebración para “encomendarle nos cuide de los feroces sismos que hoy nos afligen como sociedad, donde la pérdida del sentido de la vida y la indiferencia estrechan los horizontes de la amistad social por imperio de la avidez, la agresividad sin límites, la denigración del que piensa diferente, el individualismo y la absoluta falta de empatía en relación con los otros”.
Por último, Mons. Colombo oró por el futuro de la provincia y los mendocinos en general: “Rendidos ante tu bastón peregrino y ante la Palabra de Dios en tus manos, Patrón Santiago, nos confiamos a tu protección para que intercedas ante el Señor y nos ayudes a ser un pueblo en camino hacia un tiempo mejor”.
