El intendente de Lomas de Zamora, Martín Insaurralde, atraviesa un momento delicado debido su contagio de Covid-19. Como es un paciente de riesgo, ya comenzaron aplicarle un tratamiento con plasma. Por estas horas, el funcionario continúa internado en el hospital Lavallol.
Esta semana, el equipo médico de Lomas de Zamora detectó en el examen diario a Insaurralde una disminución en su capacidad pulmonar y procedió a activar el protocolo. El jefe comunal, que lleva una semana con fiebre y sintomatología asociada, es asmático y padece además una insuficiencia renal, por los que los cuidados son más estrictos y urgentes.
De acuerdo con Infobae, los médicos tomaron la decisión de avanzar con el tratamiento de plasma luego de que se le hicieran exámenes que arrojaron una baja en la saturación de oxígeno.
Al momento de disponer el procedimiento se verificó que el paciente no tiene acceso venoso periférico, como consecuencia de la quimioterapia a la que fue sometido en 2011. Por este motivo, los cirujanos Martín Parodi y Diego Pintos le colocaron quirúrgicamente una vía central bajo guía de ecografía.
La intervención salió bien. Insaurralde recibió la transfusión de plasma en el sala de recuperación de quirófano y luego fue trasladado a la habitación donde continuará en reposo y aislamiento.
¿En qué consiste el procedimiento que salva vidas? El plasma es donado por pacientes recuperados de coronavirus. La directora del Instituto de Hemoterapia de la provincia de Buenos Aires, Nora Etchenique, aseguró que cada donación “podría salvar hasta cuatro personas” enfermas. Si bien no reduce el daño ya provocado por el virus, lo que hace es “detener la viremia, la replicación del virus”.
En la capital bonaerense, por ejemplo, la extracción y procesamiento está a cargo del Instituto Provincial de Hemoterapia, con sede en La Plata, y 26 de un total de 29 pacientes con coronavirus evolucionaban favorablemente a principio de mes gracias al plasma donado por personas recuperadas. Por eso, desde el Ministerio de Salud bonaerense insisten en que quienes se recuperaron se comuniquen para donar sangre.
En cuanto a la efectividad del tratamiento, la titular del Instituto de Hemoterapia puntualizó que “tiene un efecto rápido, a las 24 horas parece que los pacientes fueran otros” y reiteró la importancia de “llamar a la solidaridad para que los pacientes vayan a donar”.
Una vez conocido el caso de Insaurralde, autoridades informaron que cerca de 150 enfermos de coronavirus mejoraron su estado tras aplicarles plasma de pacientes recuperados, en el marco de un ensayo clínico a cargo de la provincia de Buenos Aires para probar la efectividad de ese tratamiento.
Según detalló la cartera sanitaria a cargo de Daniel Gollán, de esos 150, 79 experimentaron una alentadora mejoría y 20 se recuperaron por completo y fueron dados de alta.
La especialista Etchenique explicó que en el país existe una larga experiencia en el uso terapéutico del plasma a partir de la Fiebre Hemorrágica Argentina, enfermedad provocada por el virus Junín.
La terapia para combatirla fue creada y publicada por el médico e investigador argentino Julio Maiztegui, a principios de la década del ’70, y también se obtiene a partir de anticuerpos presentes en el plasma de pacientes recuperados.
“Gracias a este tratamiento la letalidad de la fiebre hemorrágica pasó de un 30 a un 3%”, recordó.
Un caso para destacar
Sandra González es una enfermera del hospital provincial de Pacheco que después de estar 21 días internada en el hospital Magdalena V. de Cordero, en el partido de Tigre, pudo regresar a su casa tras recibir el tratamiento con plasma de pacientes recuperados.
Su donante fue Magdalena Lamenza (28), médica ginécologa que, tras sufrir un cuadro leve de coronavirus, le donó plasma.
Sandra quiere conocer a Magdalena y agradecerle la donación. "Tenía miedo de morirme, la tos era constante, andaba fatigada, agotada, no podía ni caminar del cansancio por toser", afirmó.
“Al plasma te lo pasan como a un suero, me lo pusieron un domingo a la madrugada y, tres horas más tarde, pude dormir sin tos”, dijo, y transmitió el alivio que sintió al volver a descansar.
"Me sentí mejor muy rápido, por eso quisiera agradecerle a Sandra y pedirle a todos los recuperados que puedan donar, que lo hagan", agregó.
Su donante, Magdalena, no lo dudó: ya donó en dos oportunidades y sabe que cada donación puede salvar hasta cuatro vidas.
“Voy a volver a hacerlo todas las veces que pueda, y ojalá que se sumen los demás recuperados. Es una gran alegría poder ayudar en momentos como estos en que la solidaridad y la conciencia son tan importantes”, concluyó.