Desde que se habilitó el turismo interno en Argentina, Mendoza es uno de los destinos preferidos por los habitantes nacionales que deciden aprovechar fines de semana largos, recesos o simples escapaditas para escaparse de sus rutinas y desconectarse con la naturaleza. Incluso, en Mendoza la restricción para el turismo interno –en un principio, solo para mendocinos- se levantó en junio del 2020, por lo que el sector comenzó a reactivarse desde hace casi un año y medio. Y de cara al fin de año y las vacaciones de verano, el movimiento y el interés se han incrementado.
Potrerillos y sus atractivos naturales e incomparables es uno de los destinos más elegidos –por mendocinos y argentinos- para pasear y descansar. Aunque, lamentablemente, es también el escenario en el que se reportan cada vez con más frecuencias estafas a pasajeros que –creen- han reservado y alquilado alojamientos en ese paraje de la precordillera lujanina. Pero que, en realidad, han sido víctimas de engaños y estafas económicas, que han perdido dinero y no cuentan con ninguna reserva concreta.
“Por semana, nos vienen llegando -al menos- dos consultas por hospedajes para pasar las fiestas de fin de año y de personas que habían hecho una reserva y un depósito en lugares donde los estafaron. Pero esto no es nada nuevo, de hecho desde hace más de 6 meses que estamos advirtiendo sobre la situación”, destacó Fernando Perera, integrante de la Asociación Turística de Potrerillos y encargado de las Cabañas del Mesón, en el paraje montañés.
El principal –y peligroso- anzuelo para los desprevenido y desesperados turistas son las redes sociales (especialmente Market Place, en Facebook). Allí los delincuentes comparten fotos de cabañas y complejos que realmente existen y que ellos mismos roban de las páginas oficiales, las publican como que están disponibles y las acompañan de precios tan irrisorios como tentadores. En ocasiones, acompañan las publicaciones con varias fotos de los alojamientos y espacios –para darle más contundencia y credibilidad a la publicación- e incluyen números telefónicos para hacer consultas y directamente transferencias por medios electrónicos (el más común es Mercado Pago).
Sin embargo, una vez que los viajantes envían el pago de la seña –a modo de reserva- o muchas veces de la cancelación completa del costo de alquiler (generalmente motivados por supuestos descuentos tentadores que se ofrece a quienes abonan por adelantado), los supuestos dueños o encargados de los lugares desaparecen, bloquean números telefónicos y brillan por su ausencia. De hecho, cuando los ilusionados inquilinos llegan al lugar donde habían sido citados se encuentran con que no existe ninguna reserva a su nombre, la persona con quien había acordado todo ni siquiera trabaja en el lugar y, en ocasiones, ni siquiera en la ubicación indicada hay un complejo de cabañas.
“Lo que siempre le sugerimos a la gente que quiera alquilar es que las contrataciones se hagan por las páginas oficiales de la Municipalidad o de la Provincia, donde figuran los prestadores habilitados. Si se hacen por plataformas de alojamiento, lo ideal es que sean aquellas ya conocidas. Y si se encuentra algo en las redes sociales, es clave siempre chequear si ese establecimiento figura en una página oficial y hasta llamar o contactarse con el municipio para sacarse todas las dudas”, destacó a su turno el director de Turismo de la Municipalidad de Luján de Cuyo, Guillermo Barletta.
En lo que es específicamente Potrerillos, las páginas oficiales para recabar información de alojamientos son www.potrerillos.org.ar y la web de la Municipalidad de Luján, travel.lujandecuyo.gob.ar .
El testimonio de una estafada
Florencia es mendocina y, durante el último fin de semana largo, fue víctima de una de estas peligrosas y recurrentes estafas. “Es muy fina la maniobra, muy fácil de llevar adelante y de caer, porque –además- hay como un vacío. Con plataformas como Mercado Pago o Facebook hay un mundo para hacer mil cosas, pero también un vacío legal e inseguridad”, reflexionó la periodista mendocina, quien fue víctima de uno de estos engaños el fin de semana largo del Día de la Soberanía Nacional (20, 21 y 22 de noviembre pasados).
Contando con los días libres para escapar un poco de su rutina, la joven mendocina comenzó a averiguar por una cabaña en Potrerillos para alojarse con su novio. “El jueves empecé a buscar posibilidades, me apuré porque estaba muy cerca de la fecha y no encontré nada. Entonces busqué en Market Place y encontré una cabaña muy linda y que tenía disponibilidad. Me contacté con un hombre, quien me hizo una llamada por WhatsApp. En el momento no le presté mucha atención, pero era una persona que no se expresaba muy segura y se la notaba muy imprecisa. Cuando me mandó más fotos de la cabaña y del complejo, me terminó de convencer. Era realmente muy bonita”, rememoró Florencia.
La periodista mendocina hizo una transferencia por Mercado Pago del monto equivalente a la seña, tal y como le había dicho quién –hasta ese momento- se había identificado como el dueño de la cabaña. Además, también por teléfono, le enviaron a Flor la ubicación y le pidió sus datos. “Me pasó hasta una factura, bastante precaria. Cuando vi en Google Maps la ubicación que me mandó, me percaté de que era una tapera, un rancho. Además, leí los comentarios de gente que criticaba el lugar. Entonces le escribo y el hombre, que todavía me contestaba, me dijo que eran comentarios viejos y que ya había arreglado el lugar y hasta le había puesto una pileta”, siguió la víctima de la estafa.
Sin que le cerraran las explicaciones del supuesto encargado, Florencia buscó la ubicación en Facebook y confirmó lo que ya había visto más temprano: el lugar donde estaba su supuesta cabaña era, en realidad, un depósito para guardar herramientas. Cuando la mujer volvió a escribirle a quien le había alquilado el lugar –y cobrado la seña de adelanto-, el estafador le dijo que le enviaría más fotos para que se quede tranquila. Pero menos de 24 horas después, el hombre ya la había bloqueado en el WhatsApp.
“Lo primero que hice cuando me di cuenta de que me habían engañado fue tratar de hablar con alguien de soporte de Mercado Pago. Me contestaron de inmediato, me dijeron que la transacción se había hecho, pero que como había enviado el dinero como una transferencia por número de teléfono y no por QR, no tenía respaldo. Además, si bien hay un CVU (un número de identificación que da Mercado Pago), eso es algo que se puede cerrar de un momento para el otro y, al día siguiente, abrir una nueva cuenta. La verdad es que no pude hacer mucho”, destacó la comunicadora.
En base a su experiencia, Florencia Silva –quien trabaja en Mendoza Post- escribió una nota autorreferencial relatando su experiencia y advirtiendo sobre este riesgo, latente para cualquier mendocino o turista que quiera alquilar en Potrerillos. “A raíz de la nota, una mujer me contó que tenía cabañas y en la misma página de Google Maps los estafadores habían logrado cambiarle el teléfono y poner el de ellos para que más gente caiga. Es como Wikipedia, se puede editar, y hasta que el dueño o encargado de las cabañas se dé cuenta y lo corrija, pueden caer muchas personas en la trampa”, sintetizó.
Cómo evitar estafas en alquileres
Perera, quien tiene su complejo de cabañas y es parte de la Asociación Turística de Potrerillos, indicó que “si no se toman cartas en el asunto, las estafas se van a seguir incrementando”. De acuerdo a lo que él mismo escucha de turistas que llegan a sus cabañas en búsqueda de alojamiento de urgencia –y cuando ya se ha consumado el delito-, 95% de los casos en que son estafados el escenario es Market Place (Facebook).
“Están robando imágenes de complejos y cabañas que existen, pero cambian los números de teléfono en las publicaciones. ¡Ya hasta nos copian el speech!”, destacó –preocupado- Perera. Incluso, el empresario indicó que entre los propios cabañeros se mantienen en contacto permanentemente y se avisan entre sí si uno ve las fotos de las cabañas de otro publicadas en estas fraudulentas propuestas.
“Hay que reconocer también que, muchas veces, la gente se deja llevar por el pensamiento idílico de encontrar una cabaña más barata, como una especie de Meca. Y termina siendo blanco fácil. Las principales recomendaciones para quien quiere alquilar es que se maneje por páginas oficiales y, si encuentran una alternativa por fuera y es interesante, hay que pedir una página web del complejo. Esa es una herramienta que sirve”, sintetizó Perera, quien también destacó que la difusión de esta problemática es clave para contrarrestarla.
No a la tentación, sí a la denuncia
El director de Turismo de Luján de Cuyo, Guillermo Barletta reconoció que la problemática está más que vigente y se ha convertido en preocupante. “Otro problema es que muchas veces la gente no hace la denuncia formal de esas estafas y nosotros, desde la comuna, nos enteramos porque nos avisan los encargados de aquellas cabañas a las que las víctimas llegan desesperadas buscando alojamiento tras haber sido engañados. El gran problema en las redes sociales es que se generan perfiles apócrifos, tomas fotos de las páginas originales y ahí ofrecen la propuesta con precios más que bajos. “Una de las situaciones, de los procedimientos comunes es que te captan en redes sociales, con fotos impresionantes y te invitan a transferir una seña para congelar la fecha y reservar. Después de eso, uno o dos días antes de que llegue el día de ingreso, te llaman y te ofrecen cancelar todo el alquiler con una propuesta de descuento de 30%, por ejemplo. Y es tentador. Pero la gente paga toda la estadía antes de ir. Y, cuando llegan no está el lugar. O el lugar está, pero no hay ninguna reserva”, destacó Barletta.
En caso de ser víctima de una de estas estafas, la denuncia formal se debe hacer en el Ministerio Público Fiscal –más precisamente en lo que tiene que ver con Delitos Informáticos- y se puede hacer de forma virtual en este link. “Es fundamental que las víctimas radiquen la denuncia. Porque los dueños de las cabañas, por lo general, no pueden más que ayudarlos con lo que tienen a su alcance. A veces, cuando ven llegar a las personas que han sido engañadas, se apiadan y los alojan haciéndoles un reconocimiento en la tarifa. Pero eso solo si tienen lugar y hay buena predisposición”, destacó el funcionario lujanino.
Recomendaciones:
-Buscar en las páginas oficiales los alojamientos habilitados (Potrerillos: www.potrerillos.org.ar y travel.lujandecuyo.gob.ar , que tiene un asistente vía WhatsApp de 8 a 20)
-Recurrir a las plataformas de alojamiento oficiales y ya reconocidas (Booking o Arbnb, por ejemplo).
-Siempre validar en las webs oficiales cualquier teléfono de contacto que se encuentre en las redes sociales sobre un alojamiento disponible.