Un grupo de científicos pertenecientes al Instituto Politécnico y Universidad Estatal de Virginia (Estados Unidos) llevó a cabo experimentos para evaluar el impacto de los aromas y cuatro marcas reconocidas de jabón en un grupo de voluntarios. Descubrieron que una persona que ya es atractiva para los mosquitos cuando no se ha lavado las manos o el cuerpo puede volverse aún más atractiva con ciertos jabones, mientras que otros jabones pueden resultar repulsivos para los mosquitos.
Los mosquitos no se alimentan únicamente de sangre, sino que su principal fuente de alimento es el néctar de las plantas, lo que sugiere que los aromas derivados de plantas o que las imiten podrían influir en su comportamiento.
Para confirmar esa hipótesis, los científicos analizaron los olores químicos emitidos por los voluntarios antes y después de lavarse con cuatro marcas de jabón: Dial, Dove, Native y Simple Truth. También caracterizaron los perfiles de olor de los propios jabones.
El estudio reveló que cada persona emitía su propio perfil de olor, algunos más atractivos para los mosquitos que otros, y que el uso de jabón modificaba significativamente estos perfiles de olor. Según Chloé Lahondère, bióloga y coautora del estudio, “todo el mundo huele diferente, incluso después de aplicar jabón; tu estado fisiológico, tu estilo de vida, tu dieta y los lugares que frecuentas afectan tu olor”.
Los investigadores compararon el atractivo de cada voluntario para los mosquitos Aedes aegypti, los cuales transmiten enfermedades como el dengue, la fiebre amarilla, el chikunguña y el virus Zika. Descubrieron que el lavado con jabones Dove y Simple Truth aumentaba el atractivo de algunos voluntarios, mientras que el uso de jabón Native tendía a repeler a los mosquitos.
El autor principal del estudio, Clément Vinauger, resalta que lo que realmente importa a los mosquitos no es la sustancia química más abundante, sino las asociaciones y combinaciones específicas de sustancias químicas, tanto del jabón como de los olores corporales personales. Aunque los cuatro jabones contenían limoneno, un conocido repelente natural, tres de ellos aumentaban la atracción de los mosquitos.
Los investigadores también identificaron cuatro sustancias químicas asociadas a la atracción de los mosquitos y tres asociadas a la repulsión al analizar las composiciones químicas de los distintos jabones. Entre estas últimas, destacan una sustancia química con aroma de coco, que es un componente clave del bourbon americano, y un compuesto floral utilizado para tratar la sarna y los piojos.
El equipo tiene la intención de ampliar estos resultados mediante pruebas con más variedades de jabones y un mayor número de voluntarios. Además, planean investigar la duración del efecto de un jabón en el atractivo o repulsión hacia los mosquitos.
Estos hallazgos tienen implicaciones importantes en la prevención y control del dengue y otras enfermedades transmitidas por mosquitos. Tradicionalmente, se ha prestado mayor atención a los repelentes aplicados directamente sobre la piel, sin considerar el impacto de los productos de higiene como los jabones.
La información obtenida en este estudio sugiere que la elección del jabón utilizado puede afectar la atracción o repulsión de los mosquitos, y esto puede variar según las personas. Por lo tanto, es fundamental que las personas estén conscientes de esta posible relación y tomen precauciones adicionales al elegir los productos de higiene que utilizan, especialmente en áreas donde el dengue es endémico.
El equipo de investigadores espera que estos hallazgos conduzcan a una mayor conciencia y a la adopción de medidas preventivas más efectivas. Además, resaltan la importancia de realizar más investigaciones para comprender completamente los mecanismos subyacentes de esta interacción entre los jabones y los mosquitos.
