Las autoridades sanitarias de Chipre, país ubicado en el mar Mediterráneo, informaron este sábado que detectaron 25 casos de una nueva variante de infección que combina las variantes Delta y Ómicron del coronavirus SARS-CoV-2, a la que los científicos han denominado “Deltacron”.
“En la actualidad hay coinfecciones de ómicron y delta. Hemos hallado una variante que es una combinación de ambas”, advirtió el profesor de Biología de la Universidad de Chipre y director del Laboratorio de Biotecnología y Virología Molecular, Leondios Kostrikis, según difundió la agencia Europa Press.
En declaraciones a un medio chipriota, el científico sostuvo que la nueva variante tiene la firma genética de Ómicron y los genomas de Delta.
Hasta el momento Kostrikis y su equipo identificaron 25 casos de Deltacron y destacaron que son más frecuentes en pacientes hospitalizados tras haber contraído Covid-19 que en positivos no hospitalizados.
Durante el viernes fueron remitidas muestras de los 25 pacientes detectados a la base de datos internacional Gisaid del Instituto Pasteur, encargada de publicar la secuenciación oficial de las nuevas variantes de la gripe y el coronavirus.
“Veremos en el futuro si esta variante es más patológica o contagiosa o si se impondrá”, indicó Kostrikis, aunque según su opinión lo más probable es que sea eclipsada por la variante Ómicron.
Advertencia de la OMS
El aumento de los casos de Ómicron en todo el mundo podría aumentar el riesgo de que aparezcan nuevas variantes más peligrosas, advirtió el martes la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Aunque ómicron se está extendiendo rápidamente por todo el mundo, parece ser mucho menos grave de lo que se temía y ha suscitado esperanzas de que la pandemia de coronavirus pueda superarse.
Sin embargo, la responsable de emergencias de la OMS, Catherine Smallwood, dijo a la AFP que el aumento de las tasas de infección podría tener el efecto contrario.
“Cuanto más se extienda Ómicron, más se transmite y más se replica y más probabilidades tiene de generar una nueva variante”, dijo Smallwood.
“Estamos en una fase muy peligrosa, estamos viendo que las tasas de infección aumentan de forma muy significativa en Europa occidental y el impacto total de esto aún no está claro”, añadió.