Cada 20 de marzo, por iniciativa de la Organización de las Naciones Unidas y desde 2013, se conmemora el Día Internacional de la Felicidad como reconocimiento del importante papel que desempeña esta actitud / cualidad en la vida de las personas. Además, se da a conocer la actualización del ranking de países felices. Y la buena noticia es que Argentina subió 5 puntos y llegó al lugar número 52.
“Creo que Messi y la Scaloneta ayudaron un poco en el ánimo social”, reflexiona en voz alta uno de los principales referentes de World Happiness Foundation para Argentina, Gaspar Contreras. “La Felicidad debe ser considerada un Derecho Básico Universal, al que los Estados deben poner en el centro de la escena”. resalta el académico.
-¿Por qué se celebra el Día Internacional de la Felicidad?
Esta iniciativa fue propuesta por el Reinado de Buthan. Hace dos décadas impuso la filosofía de que su gobierno se basara en la felicidad de su comunidad y así creó el concepto de Felicidad Nacional Bruta (FNB). Después de esta iniciativa, gracias a distintas organizaciones como a la que pertenezco (World Happiness Foundation) se llevó la propuesta a la ONU, para que esta invitara a los Estados Miembros a promover las actividades concretas y haciendo mucho foco en el ámbito de la educación.
Con este bienestar colectivo, se alcanzaría la tan anhelada felicidad global. Desde hace más de una década la World Happiness Foundation es la organización internacional que lidera las investigaciones, los eventos y la difusión de su importancia a nivel global.
-¿Cuál es la importancia de la Felicidad como Derecho Básico Universal?
Es momento que las sociedades empiecen a ver a la felicidad como un derecho y los gobernantes deben considerar al Bienestar Ciudadano como una política pública, buscando la justicia social. Si la política no logra poner en el centro de la escena al Bienestar de sus vecinos, ese lugar lo tomará indefectiblemente el mercado y el mercado redefine la realidad como una acción individual.
La felicidad individual debe estar regida por un bienestar colectivo, sin dejar a nadie atrás. Es por eso que se encuentra tan presente en cada uno de los Objetivos de Desarrollo Sostenible 2030. La felicidad no es producto de la acción o voluntad individual. Es social. Si es social, es colectiva y diversa.
-¿Qué países lideran el ranking internacional de Felicidad que se difunde anualmente? ¿Cómo se encuentra la Argentina en ese ranking?
Según el Informe Mundial sobre la Felicidad, elaborado por la reconocida consultora Gallup, Finlandia, Dinamarca y Noruega -los países nórdicos del Viejo Continente- se quedan con los primeros puestos desde hace 6 años. Este año la gran sorpresa fue Israel, que subió al puesto 4. Casualmente hoy se presentó el último informe global de países felices, y Argentina subió 5 lugares posicionándose en el puesto 52.
¿El malestar social influye en ese informe?
Por supuesto que influye el malestar social, la economía y la crisis institucional que vive el país, pero hay otros factores que, al ser medidos de manera global, nos ayudaron a crecer. Hay que analizar la situación de los países europeos y las crisis que está dejando la guerra de Ucrania.
También creo que Lionel Messi y la Scaloneta ayudaron un poco en el ánimo social.
¿Se puede desarrollar la Felicidad?
Estoy absolutamente convencido que sí. Varias universidades de prestigio como Harvard, Yale, FIU, Oxford entre tantas otras han desarrollado herramientas para re- descubrir la felicidad.