La madre de Fernando Báez Sosa, Graciela Sosa, realizó un emotivo posteo en su cuenta personal de Instagram, a una semana de la condena a los ocho rugbiers acusados por el homicidio de su hijo. Los seguidores de Graciela le mostraron su cariño a través de los comentarios y compararon el hallazgo del ave con una señal de Fernando.
Se trata de un pichón, ubicado entre una maceta que contiene flores de plástico, que apareció aparentemente el lunes pasado. El pájaro se habría alojado en la casa de Graciela al mismo tiempo en el que los padres de Fernando concluían el proceso judicial, el cual terminó con la pena de entre 15 años de cárcel y prisión perpetua para los asesinos de su hijo.
Junto a la foto de la pequeña ave, Graciela escribió: “Hace una semana nació en mi ventana. Ya está listo para volar. Lindo”. Los usuarios no dudaron en hacerse eco de la publicación con buenos deseos y comparando el vuelo del pichón con la despedida de Fernando, tras hacerse justicia.
“Son señales de Fer, ya tiene paz”; “Fer te envía señales, te abrazo fuerte, Gra”; “Son esas cosas que nos hacen sentir cerquita a quienes ya no están cerca”; y “Sin duda una señal del cielo”, fueron algunos de los mensajes que recibió la publicación, que ya tiene cerca de 35 mil “Me gustas”.
Los ocho condenados por el homicidio de Fernando Báez Sosa fueron trasladados el lunes pasado, tras la lectura del veredicto, a la alcaidía de Melchor Romero. En este lugar, los rugbiers cumplieron la mayor parte de los tres años que llevan detenidos con prisión preventiva.
Fuentes judiciales indicaron que más adelante se resolverá si ese continuará siendo su lugar de detención, o si, ya con una condena en primera instancia dictada por un tribunal, serán trasladados a otra unidad penal. Los familiares de los condenados insistieron con el traslado al Complejo Penitenciario de Campana, para obtener ciertos privilegios.
Respecto a los rugbiers, Graciela Sosa manifestó el lunes pasado que “es muy difícil perdonarlos. Me arrebataron un hijo que solo quiso ir a divertirse y mi hijo regresó en un cajón cerrado del que nunca más va a salir. Su ausencia y nuestro dolor es perpetuo para siempre”. Esta declaración la brindó tras conocerse el veredicto.