Si bien existe ya hace años la modalidad de pedidos a domicilio, con la cuarentena este trabajo incrementó su carga horaria y variedad de cosas a trasladar. Tanto quienes estaban acostumbrados a pedir “delivery” como aquellos que nunca lo utilizaban, comenzaron a incorporarlo a sus rutinas de confinamiento.
Además, a las aplicaciones telefónicas ya existentes se sumaron locales gastronómicos de todo tipo que tuvieron que incluir esta modalidad para poder vender y también la opción del “take away”, con la que, básicamente, el pedido se hace de manera telefónica o presencial y se retira en persona por el lugar elegido.
En este rubro que sigue ampliándose y reinventándose cada semana, ya que por la situación económica de la pandemia hay que buscar la mayor cantidad de alternativas posibles, no sólo están las personas que con su bicicleta o moto llevan el pedido a los hogares si no también emprendedores que lo han comenzado a implementar.
Los emprendedores locales se suman al delivery
Uno de ellos es Luca Romanello, de Prucca Food, que hace años vende huevos de chocolate para las Pascuas y ahora sumó comidas al menú que ofrece. “Cuando empezamos a hacer huevos la gente los iban a buscar. Este año, por la situación, lo hicimos todo con envíos a domicilio. La idea es tener un servicio de catering a futuro así que aprovechamos la cuarentena para sumar pedidos de comida y nos ha resultado bien”, contó el joven emprendedor.
Un caso similar es el de cuatro amigos que lanzaron su emprendimiento en plena pandemia para vender papas. Cultivos Andinos comenzó esta semana y, además de hacer envíos a domicilio, están en algunas verdulerías.
“Nosotros mismos las llevamos. Hacemos todo; sembramos, cosechamos, seleccionamos, tamañamos, lavamos, fraccionamos y etiquetamos. Laburamos de manera muy social, con gente de La Fundición de Uspallata, y la idea es ofrecer un producto local de primera calidad”, relató José Giménez.
El alcohol y la Policía
Asimismo, entre los trabajadores que se dedican exclusivamente a hacer delivery, hay distintos testimonios de lo que han vivido con la pandemia. Diego, trabajador de Pedidos Ya, por ejemplo, comentó que ha visto muy incrementado el pedido de bebidas alcohólicas. “La gente pide de todo, comida, mucho alcohol. Hasta las 19 se puede pedir pero suelen pedir de noche, insistir, ponernos en riesgo. Es como que no les importa con tal de que les llegue el alcohol”, remarcó el repartidor.
Otro delivery que prefirió reservar su nombre analizó que ahora la policía se ha relajado con ellos. “Antes nos pedía de todo y nos revisaban porque había pibes que trasladaban drogas. Ahora hay más respeto”, aseguró.
En cuanto a las ventas, dijo que si bien disminuyeron hace dos semanas “esta última se empezó a mover más. Además la gente está más tranquila pero hace unas semanas atrás hicimos paro por la inseguridad”, recordó el trabajador.