El DNU publicado hoy en el Boletín Oficial por el gobierno nacional y anunciado anoche por el presidente Javier Milei establece cambios en la dispensa de medicamentos. En este sentido propende al uso de la receta electrónica y la indicación de medicamentos por nombre genérico (no por su marca comercial).
“Con el objetivo de aumentar la competitividad del mercado debe reformularse la ley de medicamentos y recetas, migrando a la receta electrónica, a los fines de lograr una mayor agilidad de la industria y minimizar costos”, refiere. Es decir que se deberán usar, para el expendio de aquellos medicamentos que lo requieran, recetas electrónicas firmadas en las plataformas virtuales correspondientes. Cabe destacar que se trata de una estrategia que ya utilizan las obras sociales con mayor cantidad de afiliados, Pami a nivel nacional y Osep en Mendoza. También algunas prepagas.
Ante esto, la inquietud es cómo se debe ir a comprar hoy un medicamento a las farmacias. Lo cierto es que allí, los farmacéuticos por lo pronto, por lo reciente de los cambios, no están muy seguros sobre cómo proceder y deben consultar.
“Hasta ahora ha llegado solo Osep y Pami, que tienen recetas electrónicas, cuando me llegue de una obra social que no tenga tendré que llamar a mi jefe para preguntarle qué hago”, comentó una farmacéutica de Maipú.
Desde el Colegio Farmacéutico de Mendoza remarcaron que por ahora el expendio no sufre cambios. Mario Valestra, presidente de la entidad, señaló que la implantación es un proceso ya que requiere que los médicos cuenten con su firma electrónica en un sistema.
Hay que decir que el avance sobre esta estrategia se aceleró fuerte con la pandemia, aunque no todas las obras sociales lo tienen implantado, en este sentido Valestra dijo que aquellas que usan receta papel deberán continuar de este modo hasta que la prestadora cambie su sistema.
¿Qué pasa si hoy voy a comprar con una obra social que no tiene receta electrónica todavía? “Nada, te puedo dispensar de forma normal una receta común”, explicó el farmacéutico. Con esto se refirió a una “receta común, una receta prescrita por puño y letra del médico”, aclaró.
Asimismo explicó que de todas formas 99% de las recetas o dela prescripción médica requiere la validación a través de una plataforma de las obras sociales donde se verifica que el afiliado está en condiciones, que el médico le prescribió bien, que la patología que está describiendo y el medicamento concuerda y el precio. “Eso hoy es así en todas las farmacias del país; ahora, lo que se está buscando es la prescripción digital, es decir, que el médico tiene que digitalizar su firma, primero, para poder entrar en una plataforma y poder prescribir digitalmente. Hoy, hay muchos médicos que tienen la firma digital y hay otros que no”, detalló.
Entonces, hay un trabajo previo a esta norma que tiene que realizarse.
En definitiva, si se va a comprar hoy con receta las condiciones son las mismas que ayer: van a pedir la receta en papel en el caso de las obras sociales que no tengan implementado ese sistema de receta electrónica. La implementación va a requerir un tiempo, como ha ocurrido con las que ya adaptaron el sistema, hasta que todos los médicos tengan su firma digital.
Por genéricos
Por otra parte, el decreto señala que se deberá expresar en todas las recetas o prescripciones médicas el nombre genérico del medicamento o denominación común internacional que se indique, la forma farmacéutica y dosis/unidad y el detalle del grado de concentración. Se trata de indicar el producto por el nombre de su droga y no por su nombre comercial. Se describe que es igual a un medicamento de marca registrada, tanto en la dosis, seguridad, concentración, vía de administración, calidad, rendimiento y uso previsto.
“Frente a la crisis del sistema de salud es imperativo lograr reducciones contundentes en los costos de las prestaciones, lo que en definitiva redundará en un beneficio directo para la población en general”, asegura la disposición gubernamental.
Esta forma de prescripción ya existe aunque se coloca también la marca sugerida.