Una de las estrategias fuertes en las que trabaja el Gobierno de Mendoza es en la recuperación del dinero que el sistema público de salud de la provincia eroga en la atención de la salud de personas que tienen cobertura, ya sea por obras sociales o prepagas. Es que el sistema público ofrece un servicio gratuito que está destinado a quienes no tienen esa asistencia y si bien también puede atender a quienes tienen prestadora, este servicio se les debe cobrar a estas. Sin embargo, durante largos años el recupero de ese dinero ha sido muy deficiente y por eso ahora se apunte a mejorar esa gestión.
De acuerdo a los cálculos que ha hecho el Ministerio de Salud de Mendoza, con las nuevas estrategias esperan triplicar los montos que la provincia recupera. Tal cual ha señalado el área, hasta ahora se logra recuperar en torno a 30% del total de prestaciones que se brinda a este segmento. La mejora se espera gracias a la creación de un nuevo ente, que tendrá a cargo la gestión centralizada de todos los efectos públicos.
La avanzada estará en manos del flamante Ente de Recuperación de Fondos para el Fortalecimiento del Sistema de Salud de Mendoza (Reforsal) y con ello se espera obtener el ingreso de casi $15.000 millones anuales. Su directora, la Licenciada Daniela Correa, especificó que se trata de un proceso que se dará de manera paulatina y que se trata de un número estimativo que no se ha afinado aún. El cálculo se hace a partir de lo que el sistema público percibió por este ítem durante 2023, que fue de $4.800 millones.
Hay que tener en cuenta además que el sector está atravesando un periodo de incremento de la demanda, que el ministerio estima en 30% los últimos meses.
Esto está asociado a varios factores del contexto socioeconómico. Por un lado, una buena proporción de las obras sociales y prepagas comenzaron a habilitar el pago de coseguros. Por otro, las entidades que nuclean a los médicos han optado por fijar un valor mínimo de la consulta, que a partir de agosto será de $20.000, mientras que la consulta en Psiquiatría ascenderá a $27.500. Dado que los valores que las prestadoras pagan por los servicios son considerados bajos por los profesionales, son los pacientes los que deben cubrir la brecha entre estas y el valor fijado. Incluso son cada vez más los médicos que optan por no recibir obras sociales.
A esto se suma un deterioro del poder adquisitivo de las familias y un aumento de personas desocupadas que quedan sin cobertura.
Sistema unificado
“La provincia está implementando un sistema de gestión unificado. La idea del Reforsal es que va a centralizar el cobro de todas estas prestaciones, es unificar el sistema, unificar las estadísticas, unificar el cobro, tiene que ver con la estandarización y con la mejora continua del proceso”, destacó Correa.
Es que hasta ahora cada efector realizaba sus propios procesos de recaudación, que iniciaban con el ingreso del paciente y los correspondientes datos, lo cual según señalan en el ministerio no siempre se hacía adecuadamente. Luego, ellos mismo realizaban la gestión para que la prestadora pagara el servicio, lo cual, afirman, tampoco era eficiente.
“Se crea un organismo nuevo que va a centralizar ese proceso de recaudación, buscando así sintetizar el proceso, ahí vemos una oportunidad de mejora enorme”, apuntó la licenciada.
Pero a esto se suma, que tal cual vienen advirtiendo los médicos, clínicas y sanatorios, se trabaja con un nomenclador muy desactualizado, con valores que están muy por debajo de los costos reales de los servicios. Como plus, los pagos se producen con muchas dilaciones. Las obras sociales y prepagas están pagando a un plazo de entre 90 y 120 días. Esto, según dijo Correa no ha logrado modificarse y es lo que médicos y clínicas denuncian que ha llevado a un desfinanciamiento del sistema, sobre todo los meses previos, cuando la inflación asestaba un golpe durísimo para la administración de los presupuestos y con una buena parte de los insumos a valor dólar.
Parte de lo que se busca cambiar es el cobro a pacientes extranjeros, aunque advierten que la incidencia en los efectores es baja, en torno a 2%. La medida alcanza a quienes sean considerados “no residentes”, quienes deberán absorber la totalidad del costo de los servicios que reciban y, según observan, hay mayoría de personas chilenas, peruanas y bolivianas. Quienes accedan en estas condiciones, podrán tener un comprobante que les permita gestionar el reembolso por parte del sistema de cobertura que tengan en su país.
Reforma amplia
Cabe recordar que en febrero el gobernador Alfredo Cornejo y el ministro de Salud y Deportes, Rodolfo Montero, presentaron el Plan Provincial de Salud 2024-2030 y un paquete de 26 leyes, varias ya aprobadas y en cuyo marco se dan estas reformas.
El lunes, el gobernador destacó que la mejora en el cobro de la atención médica estará destinada “en parte” al nuevo régimen de incentivos para profesionales, aprobado por la Legislatura también dentro de la amplia reforma de Salud.
“La idea es que el hospital público quede con los mismos servicios de ahora, con mejor calidad y prestaciones como venimos haciéndolo, pero que haya circulación de dinero. Que paguen los que tienen obra social y que sea gratuito para el que no la tiene”, sostuvo el mandatario.
Nuevo nomenclador propio
Con todo esto, la otra pata de la mejora en los ingresos que esperan estará dada por la creación de un nuevo nomenclador. La provincia ha trabajado en la creación de un nomenclador propio, con valores actualizados, que comenzará a tener vigencia el 1 de agosto, Así, dejará de estar atada al nomenclador nacional que establece la Superintendencia de Servicios de Salud (SSS), vigente hasta ahora.
La funcionaria destacó que se trata de algo importantísimo y señaló que con esto se incrementarán los costos de las prestaciones en entre 300% y 400% según el caso.
“La idea no es crear una empresa con el Estado, sino igualar un poco y devolverle también el costo a la salud pública de lo que invierten los mendocinos; no tiene por qué la provincia subvencionar capitales privados”, subrayó.
Explicó que en el nuevo sistema de gestión se va a cambiar “totalmente el sistema de salud”. “Las obras sociales van a poder auditar mediante ese sistema de gestión, vamos a tener registro unívoco de pacientes y se va a digitalizar el proceso. La idea es que de a poquito se vaya equilibrando y regularizando el proceso para que sea cada vez más eficiente”, afirmó.
Otra de las expectativas es que paulatinamente se achique el tiempo de pago para que sea mes a mes.