Marcelo Fabián Rodríguez, el hombre de 49 años que murió en un vuelo de Flybondi, había viajado a Bariloche junto a su hija para cumplirle un sueño a la adolescente de 17 años.
Momentos después de despegar, el piloto tuvo que aterrizar de emergencia en Neuquén debido a que el pasajero se había descompensado y pese a los intentos de asistirlo, Rodríguez falleció.
Vity Fernández, hermana del hombre que vivía en Carlos Paz, contó en Noticiero Doce que Marcelo estaba atravesando un segundo cáncer y seguía bajo tratamiento oncológico.
“Él me pidió viajar a Bariloche con su hija, ya que la enfermedad lo había empobrecido y no pudo pagarle el viaje de estudio con todos los compañeros”, contó.
Al regresar, Rodríguez debía retomar con el tratamiento por el avanzado cáncer de mama, pulmón y huesos que le habían diagnosticado.
“Era un tipo con mucha fe, que nunca se quejaba. Lo veíamos que no estaba bien”, dijo su hermana. Según le informaron desde la aerolínea low cost, “tuvo un paro cardíaco en el avión y ahí dejó de existir”.
Ahora, la familia está tratando de juntar el dinero para poder llevar el cuerpo de Marcelo a Córdoba y darle el último adiós. Pero necesitan más de un millón de pesos.
Vity contó que solicitaron ayuda a la Policía de Córdoba, debido a que Marcelo pertenecía a la fuerza desde hacía 20 años, pero le dijeron que reclame a Flybondi.
“Dejó toda su vida en esa fuerza que no la pasó bien porque ni siquiera es reconocido. No quiero entregarle a mi madre una urnita porque Marcelo era un ser de vida, buena gente”, cerró.