El viernes, en General Alvear se entregó el primer barrio sustentable construido por el Instituto Provincial de la Vivienda (IPV) en Mendoza. Son 16 casas que forman parte del 32% de las viviendas sociales que fueron licitadas por el organismo y que se encuentran en ejecución con un sistema industrializado. Estas unidades habitacionales buscan disminuir los tiempos de ejecución de obra y un aumento de la eficiencia energética para sus propietarios.
El barrio Don Valentín, ubicado en el distrito alvearense de Bowen, está formado por 16 casas, emplazadas según la tipología solar de Norte a Sur, de dos dormitorios, cocina comedor, baño y lavadero. La construcción se comenzó en noviembre, tras adjudicarse la licitación realizada en abril del año pasado. El mismo se realizó bajo el sistema industrializado New Panel.
Cada vivienda cuenta con 61.95 metros cuadrados cubiertos, que fueron ejecutados mediante la colocación de paneles hechos con placas OSB y espuma de poliuretano de alta densidad. Tanto las paredes como el techo fueron construidos con esta tecnología para optimizar la aislación térmica de la vivienda. Para la terminación de la obra se recubrieron las paredes con una membrana hidrófuga y luego se revistieron con placas cementicias.
La carpintería de la vivienda está realizada en aluminio con doble vidriado hermético (DVH), lo que contribuirá a una mejor aislación térmica del exterior. Y fueron equipadas con un termotanque solar para el abastecimiento de agua caliente y de un calefón instantáneo que funciona de manera complementaria.
Materiales no convencionales
En junio, en el barrio Flores-Olivares, se entregó la primera vivienda diseñada con materiales no convencionales por el Laboratorio de la Vivienda, organismo que funciona bajo la órbita del Ministerio de Planificación e Infraestructura Pública con el apoyo del IPV. A partir de este proyecto, en 2021, el organismo hizo foco en la utilización de los materiales industrializados para la construcción de sus barrios, centrado en la ventaja del tiempo de ejecución, que puede ir entre los 6 y 12 meses, según las dimensiones de cada emprendimiento.
Los sistemas constructivos en seco aprobados son el Steel Framing (que se realiza por medio del montaje de perfiles de acero), New Panel (sistema de placas encastradas) y Cassaforma (sistema de moldes temporales o permanentes que se utilizan para dar forma al hormigón).
Además del barrio Don Valentín, la empresa Titulizar ejecuta la construcción de 74 unidades que conformarán el barrio Malvinas Argentinas III. Ambas obras en General Alvear fueron etiquetadas dentro de la clase C.
Los prototipos que se utilizan en la construcción de estas viviendas fueron diseñados por el Laboratorio de la Vivienda. Entre ellas figura el prototipo Solar, modelo que se lleva adelante en dos barrios de Alvear, y establece que las casas tienen que estar orientadas hacia el Norte para aprovechar la luz del sol. Es por eso que la configuración de las manzanas es totalmente distinta de la de los barrios tradicionales del IPV.
Don Valentín es el primer barrio sustentable que el IPV entrega en la provincia, cumpliendo con la Ley de Etiquetado Energético que se promulgó a principios de 2022. “Las características de las viviendas les traerán un beneficio muy grande a las familias en cuanto a los costos de los servicios, ya que van a poder ahorrar energía, tanto en verano como en invierno. Esto hace que sean las primeras casas innovadoras que entregamos en esta gestión”, explicó la titular del IPV, María Marta Ontanilla.
Números e innovación
Luego de la entrega de la primera casa social en el barrio Olivares, de Ciudad, ejecutada con materiales que no son los convencionales, Don Valentín es el primer barrio que se construyó bajo esta tecnología en Mendoza. Hoy el 32% de las viviendas en ejecución del IPV son industrializadas, mientras que otras 266 están en proceso licitatorio, lo que representa el 28% del total de las obras que están por iniciarse.
Unas de las innovaciones que presentó el barrio Don Valentín es la oficialización de una etiqueta de ahorro energético, escala de letras que es diferente para cada zona climática del país.
Estas categorías con las que son clasificadas las nuevas construcciones responden a los aspectos relacionados con el diseño arquitectónico, orientación, protecciones solares, los sistemas constructivos utilizados, la calidad y estado de las aberturas, las infiltraciones de aire, los sistemas de calefacción, refrigeración, calentamiento de agua e iluminación instalados, y las eventuales instalaciones de energías renovables.
La Etiqueta de Eficiencia Energética está asociada a un rango de valores del Índice de Prestaciones Energéticas (IPE) y es un valor característico de la vivienda. Representa el requerimiento teórico de energía primaria para satisfacer las necesidades de calefacción en invierno, refrigeración en verano, calentamiento de agua sanitaria e iluminación, durante un año y por metro cuadrado de superficie, bajo condiciones normalizadas de uso. Se expresa en kWh/m2año.
Desde los prototipos
Tras la creación del laboratorio de la vivienda, en 2020, se realizaron distintas pruebas y se elaboraron tres prototipos habitacionales, que se ubicaron en Capital, Guaymallén y San Carlos. El primero en entregarse fue el ubicado en el barrio Olivares, de Ciudad. En la ejecución de esta vivienda se trabajó de manera mancomunada entre organismos públicos y empresas privadas, que aportaron materiales, insumos y servicios.
La empresa mendocina New Panel proveyó e instaló todos los paneles perimetrales y del techo para esta vivienda. Sistema que, además de posibilitar un ahorro energético, redunda en un mayor confort. En el proyecto también colaboró la Red Edificar, compuesta por varias empresas del medio que aportaron diversos materiales y equipamiento.
El prototipo sustentable también contó con un sistema solar térmico para el calentamiento del agua y el aire a través de un calefón y calefactor solar que aporta muchos beneficios a la vivienda, al medio ambiente y al confort familiar. El objetivo primordial de estas tres casas, que fueron emplazadas en lugares estratégicos para estudiar sus consumos energéticos frente a las condiciones climáticas, era servir como modelos de eficiencia para ser replicados luego en otros emprendimientos a gran escala por el IPV.