Con 6 años de duración y materias más específicas, la escuela técnica de Mendoza presentó mayor cantidad de alumnos desconectados durante el primer semestre, en comparación a la escuela orientada. Según el informe de avances de gestión de la Dirección General de Escuelas (DGE), difundido esta semana; un 35, 86% de los estudiantes de técnica tuvo más de 10 faltas no computables, cuando en orientada este porcentaje fue del 25,7%. Distinta fue la situación de la primaria, ya que allí un 5,6% se ubicó en esta misma categoría.
En este documento, elaborado con datos hasta julio de 2020, el gobierno escolar detalló todos los esfuerzos realizados para la continuidad del proceso educativo en medio de las restricciones impuestas por la pandemia y también dio cuenta de la necesidad de seguir trabajando para fortalecer las trayectorias de los más vulnerables. Es que en ese periodo detectaron 15.072 chicos con necesidad de recursos tecnológicos; 8.990 con trayectorias discontinuas y 14.414 con dificultad pedagógica.
Consultado por la situación de las secundarias técnicas, el director de Educación Técnica y Trabajo, Carlos Daparo explicó que este tipo de educación la presencialidad es aún más importante que en orientada ya que tienen gran cantidad de horas prácticas en taller y laboratorio, lo cual en un principio resultó más complicado de adaptar. “En agosto y septiembre hemos logrado conectar todas esas materias que nos faltaban. Hemos implementado todo un programa especial para que se puedan retomar las actividades en el contexto actual, con simuladores virtuales, hackaton, entre otros”, detalló el funcionario.
Por esa razón aseguró que en estos últimos meses ha bajado el porcentaje de alumnos desconectados en relación al primer semestre, que fue cuando se tomaron los datos. “Si bien en un principio como todo el sistema tuvimos un problema de conectividad ya hemos podido determinar a quiénes estamos llegando. En sexto tenemos a todos, pero nos quedan chicos de cuarto y quinto”, reconoció Daparo. En tanto resaltó que todos los esfuerzos siguen puestos en “no perder a ningún estudiante”.
Ricardo Arias, regente de la escuela técnica Pablo Nogués de Capital, informó que en esa escuela tienen 1.235 alumnos y que contabilizan como no conectados, tal como define la DGE, a unos 30. “El trabajo clave ha sido el de los preceptores para mediar entre los profesores, alumnos y familias”, aseguró.
Lo que él notó durante el primer cuatrimestre fue que al recibir trabajos y tareas de materias tan específicas a los chicos les faltaba el acompañamiento del profesor. “Eso ha repercutido en que por ahí algunos se frustren y no estén tanto tiempo conectados como en la orientada”, comentó. De todas formas, durante el segundo periodo de clases en este establecimiento se ha ido revirtiendo. “Los profes se dieron cuenta de la necesidad de tener más contacto con los alumnos y hemos notado un aumento grande de reuniones a través de plataformas como Meet o Zoom para evacuar las dudas”, relató.
Por su parte, Alejandro Malnis, director de la escuela Ingeniero Carlos Fader de Luján de Cuyo, señaló que tienen 917 alumnos de los cuales solo 3 entran en la categoría de no conectados, pero que han notado que alrededor de un 40% presenta algún grado de dificultad con la conectividad. “Las problemáticas son de lo más diversas y como escuela estamos tratando de llegar a la mayor cantidad posible”, aseveró. Una de las tantas estrategias que allí han implementado ha sido cargar gran parte del contenido que dan los profesores a una plataforma web desarrollada en el mismo colegio. “La enseñanza telemática priva de muchas cosas como, por ejemplo, el entusiasmo que transmite el docente, pero dentro de lo que se puede nosotros hemos avanzado”, manifestó.
Más conectados en primaria
Mercedes Monzón, directora de Evaluación Educativa de la DGE, remarcó que desde allí vienen haciendo un rastreo mensual de la situación en cada uno de los niveles. “El sistema nominal con el que contamos (GEM) nos permite hacer un seguimiento de los que están teniendo dificultad en las trayectorias”, aseguró.
En tanto comentó que desde allí no les sorprende que la mayor cantidad desconectados se dé en el nivel secundario en contraste con el primario. “Tiene que ver con la motivación de los alumnos en continuar con los estudios, a los chicos de primaria les gusta el poder tener actividades diarias y a su vez tienen mayor influencia de los padres en el seguimiento”, consideró. Por otra parte, reconoció que en secundario el entusiasmo de los jóvenes suele decaer. “Son adolescentes que tienen que transitar las consecuencias de una pandemia lo cual no es nada fácil”, expuso Monzón.
Sobre la cantidad de estudiantes a nivel general con diferentes problemáticas para el aprendizaje, explicó que se los reconoce y se divide en diferentes categorías para poder articular una solución. “Los que tienen necesidades de recursos tecnológicos están en una lista que reúne a aquellos a los que se les puede hacer llegar algún equipo, los que necesitan apoyo escolar en otro y así para poder activar protocolos específicos de acuerdo a la problemática”, indicó la funcionaria. De hecho, tal como se detalla en el mismo informe todos ellos serán tomados para trabajar de forma prioritaria en una Red de Apoyo a las Trayectorias Escolares durante este segundo periodo escolar.
Pérdida de aprendizajes
Según un informe del Observatorio Argentino por la Educación que toma datos de todo el país, en primaria 6 de cada 10 familias consideran que su hijo está perdiendo aprendizajes importantes a causa del aislamiento. Se trata del documento “Percepción acerca del aprendizaje y conformidad con los docentes durante la cuarentena”, con autoría de Mariano Narodowski, Víctor Volman y Federico Braga. Tal como se detalla en el texto, en el marco de la interrupción de las clases presenciales, el 62,7% de las familias considera que los alumnos están perdiendo aprendizajes importantes, mientras que el 28,7% considera que no se están perdiendo aprendizajes, y 8,6% no sabe. De todos modos, la mayoría valora el esfuerzo que están realizando los maestros y maestras de sus hijos: 7 de cada 10 familias se muestran conformes con el trabajo de los docentes en las escuelas primarias estatales. La encuesta se realizó entre el 24 de junio y el 3 de julio y fue respondida por familias en base a una muestra representativa a nivel nacional de escuelas primarias comunes de gestión estatal en ámbitos urbanos.
