La detención de Marcelo “Teto” Medina y otras personas que formaban parte de “La Razón de Vivir”, un centro asistencial para la recuperación de adictos a las drogas, generó conmoción en quienes conocen la carrera del mediático y estupor entre los pacientes que asisten a dicho centro y las familias de los mismos.
Pero la confusión se fue apoderando de los protagonistas y de los espectadores, luego de que se fueran sumando distintos testimonios que defienden a toda costa a la organización y a sus integrantes.
Medina está acusado de integrar una asociación ilícita denunciada por estafas, reducción a la servidumbre y explotación laboral, aun así varias personas se acercaron al predio del centro asistencial que está en el municipio bonaerense de Berazategui para protestar por el operativo policial y judicial.
Dichas personas eran padres y abuelos de los internados y que se pronunciaron en favor del trabajo que realiza la comunidad destinada a la rehabilitación de personas con adicciones.
Según lo señaló TN, a la par un grupo de pacientes cantaban adentro del predio con bombos y banderas de la comunidad para defender a la organización. A un costado, los familiares los apoyaban pegados al alambrado. “Estoy re bien acá, me están salvando la vida”, confesó emocionado uno de los jóvenes.
“Nos vamos a quedar más firmes que nunca”, gritó otro de los jóvenes desde el parque de la institución que fue señalada como clandestina por los investigadores.
Los testimonios que defienden a ‘La Razón de Vivir’
La madre de una de las personas internadas aseguró a Notitrece que “Hace 6 meses que mi hijo está internado. Estamos felices. Es otra persona. Todo esto es una gran mentira”. Además agregó que “El Teto es una excelentísima persona que viene todos los días desde Capital y les da vida a todos estos chicos”.
En tanto, otra mujer, que se presentó como la abuela de uno de los internados, apuntó contra el juez que los está trasladando a otros centros. “Estamos eternamente agradecidos con las autoridades de este centro. Mi nieto hace 15 meses que está acá y me dijo que no se quiere ir. Los están sacando por otra puerta como si fuesen presos, pero todos vinieron por su propia voluntad”, detalló TN.
“Mire la cantidad de familias que hay y nadie habla mal del lugar. A los chicos les hacen lavar un baño, abrir el portón, realizar tareas de carpintería, practicar deportes. Son cosas de familia”, añadió.
Por su parte, otro familiar aseguró que “Queremos ver a nuestros hijos. Que salga el juez y nos diga dónde los están llevando. Los sacan como delincuentes por otro lado, pero ellos están acá rehabilitándose. No tenemos ninguna queja”.