El presidente Alberto Fernández define hoy qué pasará con las restricciones en Argentina por el Covid-19 a partir del próximo lunes. Si bien la idea es dejar atrás el concepto de “aislamiento” tras casi ocho meses, lo cierto es que esto aplicaría para el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA), pese al reclamo de varias autoridades provinciales por una mejora en la situación epidemiológica, como es el caso de Mendoza.
Como es costumbre, desde las 10.30 se espera que Fernández reciba a Axel Kicillof y Horacio Rodríguez Larreta en la residencia de Olivos para ultimar detalles de las modificaciones en la provincia de Buenos Aires y Ciudad de Buenos Aires. De acuerdo con lo estimado por voceros oficiales, los anuncios para la nueva etapa se concretarían por la tarde, desde Casa Rosada, aunque todavía no está definido el formato que tendrá esa comunicación.
Ya la ministra de Gobierno bonaerense, Teresa García, había adelantado esta mañana que, a partir del lunes, se pasará de la etapa de aislamiento social, preventivo y obligatorio a la de distanciamiento, pero aclaró que eso “no” significa “un fin de la cuarentena”.
En tanto, el ministro de Salud porteño, Fernán Quiros, dijo esta mañana -en su reporte habitual- que le llevarán al Presidente la propuesta de que en esta nueva etapa se permitan las reuniones sociales de hasta 10 personas en espacios abiertos dentro de las propiedades, como balcones y terrazas.
Pero la tensa definición está en el resto del país. El 23 de octubre pasado, Alberto Fernández había anunciado desde Misiones que se mantendrían las disposiciones de aislamiento y distanciamiento social “por 14 días más”, período que termina el domingo próximo.
Remarcó que ocho distritos concentraban el 55 por ciento de los contagios: Córdoba, Santa Fe, Tucumán, Mendoza, Neuquén, Río Negro, Chubut y San Luis. El Gobierno resolvió entonces que Misiones, Corrientes, Formosa, Entre Ríos, La Pampa, Catamarca, Jujuy y San Juan se encuadrarían en la modalidad de Distanciamiento Social, Preventivo y Obligatorio (Dispo), mientras que departamentos y ciudades de otras 16 provincias seguirán bajo la modalidad de aislamiento.
El ASPO entonces fue dispuesto para el AMBA, el resto de la provincia de Buenos Aires, Chaco, Chubut, Córdoba, La Rioja, Mendoza, Neuquén, Río Negro, Salta, San Luis, Santa Cruz, Santa Fe, Santiago del Estero, Tierra del Fuego y Tucumán.
¿Qué pasará con Mendoza?
El gobernador Rodolfo Suárez elevó un pedido a la Rosada para que el Gran Mendoza (Capital, Guaymallén, Godoy Cruz, Luján, Las Heras y Maipú), Tunuyán y Tupungato dejen la fase de ASPO y retomen la de distanciamiento, que le devolvería al mandatario provincial la facultad para más flexibilizaciones.
En caso de que Fernández insistiera con el ASPO en Mendoza, Suárez pidió a la Nación que se contemple la autorización para reanudar las reuniones familiares, turf, centros culturales y salas, jardines maternales, salas de juego y casinos, canchas de fútbol 5, escuelas de verano y natatorios en clubes.
Según el Gobierno provincial, hay mejoras en los datos de Covid-19. En las últimas semanas, los casos en Mendoza se amesetaron y se evidenció una baja en la tasa de positividad. Luego de haber llegado a picos de 50% en este último indicador - la mitad de los tests que se realizaron fueron positivos-, el miércoles, por ejemplo, se ubicó en 30% (3 de cada 10 testeados estaba contagiado).
A esta realidad se suma un alivio en la ocupación de camas de Unidad de Terapia Intensiva (UTI) en la última semana -80% en toda la provincia y 83,7% en el Gran Mendoza-.
Una vez que se realicen los anuncios en Buenos Aires y que el lunes a la medianoche se publique el nuevo decreto nacional, el Gobernador oficializará las nuevas medidas.