El pasado domingo amaneció con un cielo gris y lluvioso en Rosario. Los grandes núcleos de tormentas que atrajeron granizo podrían extenderse durante lo que resta el finde semana extra largo.
Durante la tarde del domingo se mantuvo bastante soleado por lo que los sanatafesinos pudieron disfrutar el día bajo el sol y al aire libre, pero en la noche todo cambió. Una importante tormenta eléctrica se presentó en las regiones cercanas a Rosario (incluída) y hasta hubo episodios de caída de piedra en algunas zonas.
En Funes, Roldán y Casilda, a pocos kilómetros de la ciudad, durante algunos minutos se registraron abundantes precipitaciones y granizo. En apenas diez minutos se desató la furia ya que la caída de pequeñas piedras fue intensa.
A partir de las 17 horas comenzaron a caer las gotas que el cielo prometía mostrándose turbio y gris. La yapa de la jornada dominical fue el intenso granizo que no pasó desapercibido ya que tenía el tamaño de una pelota de tenis.
Los anuncios meteorológicos anunciaban dicha tormenta con ocasional caída de granizo pero nadie esperó que fueran tan intensas.
Algunas casas de las zonas quedaron destrozadas por las piedras, como así también sillas, mesas y autos. Según comunicó El Roldanense, el intendente de la ciudad convocó una reunión con urgencia para tratar los daños.
Por otro lado, desde el Servicio Meteorológico Nacional se mantiene la alerta amarilla para el sur y centro de la provincia de Santa Fe. El anuncio indica fuertes tormentas acompañadas de intensas ráfagas, asimismo la presencia de gran actividad eléctrica.
Se esperan precipitaciones de entre 30 y 60 mm ya que el pronóstico asegura abundante caída de agua en períodos cortos. La anunciada inestabilidad se mantendría hasta el mediodía del lunes cuando la temperatura suba a 27°. Para el martes se asegura un día soleado con temperaturas similares.