La reserva La Payunia registró una intensa actividad volcánica en el pasado y, por consecuencia, gran variedad de relieves volcánicos. El trabajo desarrollado apuntó a conocer y valorar el recurso geomorfológico para su gestión, de los sitios conocidos como Los Volcanes, Pampas Negras, Volcán Los Morados y el Conjunto Volcánico Los Morados Sur, abarcando 420 km2 de superficie y ubicados en el espacio denominado Monumento Natural que contiene las manifestaciones volcánicas más recientes de la reserva.

Formas del relieve

El área presenta morfologías volcánicas muy llamativas como extensas coladas de lava formadas hace más de 20.000 años y que recorren grandes distancias llegando incluso hasta el río Grande, generando un relieve de gran interés geomorfológico como es la denominada Pasarela atravesada por la ruta nacional 40 que comunica Mendoza con Neuquén. Dicha morfología fue elaborada luego de que la lava embalsara el río y este mismo, se encargara con el tiempo de abrirse paso al cortar la roca volcánica (basalto) y formar un estrecho corredor de empinadas paredes de color negro. Por su parte, coladas de lavas jóvenes emitidas en los últimos 10.000 años, edificaron relieves particulares como Las Cascadas donde las coladas, al deslizarse por el escalón que produce la falla conocida como Bordo Alto del Payén, ocasionaron espectaculares cascadas lávicas de hasta 300 m de caída y posteriormente, al unirse, permitieron la aparición de oscuras planicies de lava que “abrazan” conos volcánicos anteriores.

Otras formas del relieve destacables son los conos volcánicos monogenéticos (formados durante una única erupción y no volverán a tener actividad) de diferentes edades como son Los Morados, el conjunto volcánico Los Morados Sur y los abundantes conos que se encuentran en el área Los Volcanes. También sobresalen en el paisaje superficies cubiertas de materiales expulsados y fragmentados durante erupciones violentas conocidos como “campos de lapilli” y los llamativos “hornitos” elaborados por amontonamiento de lava sobre la superficie de coladas.

Cartografía

Las diferentes formas del relieve reconocidas, fueron merituadas según sus valores científicos; históricos–culturales; estéticos-paisajísticos; ecológicos; de uso educativo-turístico y de susceptibilidad a la degradación, con el fin de determinar por último el valor de gestión o necesidad de protección, a través de una cartografía de Valor de Gestión, donde se puede identificar la ubicación espacial de las morfologías y las prioridades de administración establecidas. Esta cartografía está orientada a facilitar su uso por parte de los gestores de la reserva y ser comprensible para el público en general.

El valor científico se determinó por su representatividad en relación conlos procesos geomorfológicos que marcan la evolución actual, pasada y futura de cada forma de modelado. El valor cultural – histórico provino de la importancia del relieve como soporte para actividades humanas (sitios arqueológicos, aspectos históricos o religiosos, evocación para artistas o escritores y elaboraciones tradicionales como leyendas, milagros, toponimias, festividades). Asimismo, el valor estético-paisajístico se relacionó con el atractivo visual de las diversas formas de relieve que originanbellos paisajes originales y, el valor ecológico, se basó en la importancia que los relieves asumen en el desarrollo de fauna particular o especies florísticas.

A su vez, el valor de uso involucra el valor de utilización turística no agresiva al medio y el valor didáctico que se basa en la importancia científica del conjunto de morfologías para ser utilizadas para educación y formación de recursos humanos. Finalmente, se valoró la susceptibilidad a la degradación en función del estado actual de conservación y amenazas naturales y antrópicas a las que están expuestas las diferentes formas del relieve.

La carta de Valor de Gestión como paso final, permitió observar que las prioridades están centradas en el cono principal de Los Morados y su colada de lava, los campos de lapilli, las coladas que llegan al río Grande formando La Pasarela y los hornitos sobre coladas de lava recientes. Sin duda, el resto de los modelados deberán ser gestionados en un mediano plazo para asegurar la protección de la totalidad del espacio considerado.

Conclusión

Para determinar de manera exhaustiva el patrimonio geomorfológico de un área, es indispensable conocer las formas de modelado que contiene y valorarlas según diferentes criterios a considerar. Esto contribuirá a la concreción de políticas específicas de conservación y la utilización adecuada de los relieves para permitir su aprovechamiento por parte de las generaciones presentes y futuras. Dentro de la reserva La Payunia se aplicó una metodología de trabajo con el fin de establecer los relieves prioritarios y, a mediano plazo, ser gestionados para la preservación de un gran patrimonio geomorfológico de los mendocinos y del mundo.