Lorena, una mujer de 45 años, se hizo viral en las últimas horas luego de que se diera a conocer un video en el que se la ve cómo destruyó el registro civil de la localidad bonaerense de González Catán, en La Matanza. La mujer reconoció que “estuvo mal” lo que hizo. Sin embargo, afirmó haber sido víctima de malos tratos por parte de los empleados del lugar.
En dialogo con TN, Lorena aseguró que había ido a hacer un trámite de supervivencia para su mamá y estalló de furia porque los empleados del lugar se burlaron de ella y hasta le dijeron “improperios”.
“Me cansé. Esta gente se burla de uno cuando uno va con su problema”, dijo Lorena y acto seguido explicó que su madre “está postrada y no puede caminar porque tiene elefantiasis”.
Además explicó que tampoco “entiende internet y estas cosas”, y que por eso decidió ir hasta la oficina para realizar el trámite. Relató que al principio “agachó la cabeza” cuando no le dejaron hacerlo, pero finalmente estalló porque la empujó una empleada del lugar en la puerta como echándola.
Según se observa en los videos que grabaron los funcionarios, Lorena rompió los vidrios y tumbó todo el mobiliario del registro tras un ataque de ira.
“Llamá a la Policía, quiero los trámites de mi mamá”, se le escucha decir en los videos. Minutos después, una patrulla de la Comisaría Sur Segunda de González Catán llegó hasta el lugar y, luego de entrevistar a la delegada del registro civil, aprehendieron a la agresora.
“Se te burlan, te maltratan, capaz no tenés la inteligencia de ellos”, continuó diciendo sobre los empleados del registro civil.
Lorena aseguró que sabe que lo que hizo “no está bien, pero la vida no es una fantasía, es una tirana, es cruel. Yo trato bien a la gente y quiero este respeto para mí”, agregó.
También confesó que en un momento “estaba sacada” y “se quería cortar” con un vidrio. “Sentía mucho dolor, era por mi mamá, no era por mí”.
A su vez afirmó que no le preocupa la causa judicial que se le abrió: “Ya estuve presa y no me interesa”.
La causa en la que quedó implicada fue caratulada como “Daños” e interviene la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) Descentralizada N° 2 del Departamento judicial de La Matanza, a cargo de la fiscal Casal Gatto.