Diego Cardozo, exministro de Salud de Córdoba, fue imputado este lunes por la Justicia local por omisión de deberes de funcionario público, en relación a la causa que se investiga por la muerte de bebés nacidos sanos en el Hospital Materno Neonatal Ramón Carrillo de la capital, de acuerdo a lo informado por fuentes judiciales. La imputación fue decidida por el fiscal de Instrucción Raúl Garzón.
También fue imputado el exvicedirector de Gestión Hospitalaria del Neonatal, el abogado Alejandro Escudero Salama, por la misma figura, que alude a la omisión de haber denunciado los graves hechos que se dieron en el hospital.
Diego Cardozo dejó su cargo el pasado 25 de agosto luego de ser cuestionado por no alentar, presuntamente, a tiempo la situación, de la cual habría tenido conocimiento meses antes de que tomara notoriedad pública. Además, fueron apartados de sus cargos otros funcionarios de Salud que estarían al tanto de la información. Se trata del secretario de Salud, Pablo Carvajal; el director de Hospitales Capital, Esteban Ruffin; y la directora de Maternidad e Infancia, Marcela Yánover.
Acusadas por delito de “falsedad ideológica”
Más temprano, la Justicia resolvió ampliar las acusaciones por el delito de “falsedad ideológica” a una enfermera y dos ex directivas del Hospital Materno Neonatal Ramón Carrillo.
Si bien la causa todavía se mantiene con secreto de sumario, una fuente judicial indicó que el fiscal decidió ampliar la acusación por “falsedad ideológica” a la enfermera Brenda Agüero, de 27 años, detenida desde el 19 de agosto e imputada por “homicidio agravado reiterado por procedimiento insidioso”, al que ahora también sumará en grado de “tentativa”. Agüero está apuntada como sospechosa de inocular intencionalmente sustancias tóxicas a los bebés que luego le ocasionaron la muerte. La ampliación de la acusación de “homicidio agravado reiterado por procedimiento insidioso, en grado de tentativa”, está relacionada a los bebés que también fueron inoculados intencionalmente con sustancias tóxicas y sobrevivieron que, en principio, son ocho.
La abogada Daniela Morales Leanza, representante legal de una de las mamás de una beba sobreviviente, nacida el 6 de junio de este año, manifestó a Télam que María es una de las que solicitó la ampliación de la acusación contra la enfermera. Entre las pruebas documentales presentadas se encuentran análisis que “confirman la inoculación intencional de potasio” que, según dijo, le dejó secuelas a la beba. Indicó que desde entonces está siendo sometida a un “tratamiento de fisioterapia y dermatológico por pinchazos en la espalda que luego se transformaron en hematomas y después en necrosis” de la piel.
La nueva acusación también alcanza a la exdirectora del Hospital Materno Neonatal “Ramón Carrillo”, Liliana Asís, y a la ex jefa del área de Neonatalogía, Marta Gómez Flores, quienes se encuentran imputadas por los delitos de “omisión de los deberes de funcionario público”. Ambas ex directivas serían indagadas en el curso de esta semana por el fiscal Garzón.
El caso
El 11 de agosto de conoció la investigación judicial a partir de denuncias por la muerte de cinco bebés nacidos sanos entre marzo y junio pasados. Los informes periciales preliminares determinaron que la muerte de dos bebés, nacidos el 6 de junio, ocurrió por cuadro de “hiperpotasemia” que fue causado por “por exceso de potasio inyectada de manera intencional”, ya que se descartaron otras patologías, error y mala praxis.
El ministro de Salud provincial, Diego Cardozo, renunció el mes de pasado luego de los cuestionamientos que recibió por no haber denunciado el hecho ante la justicia. Según la investigación, en marzo el funcionario ya estaba al tanto de lo que estaba pasando pero solo se había sumado un sumario administrativo interno. En su lugar asumió Gabriela Barbás, quien estaba al frente de la Secretaria de Prevención y Promoción de la Salud de esa cartera.