Lucas Palma tiene 18 años, es maipucino y nació el 3 de mayo de 2003. Es futbolista y juega de delantero en las inferiores de Boca, club al que llegó hace cerca de cuatro años. Y el sábado pasado le tocó vivir un momento histórico, de esos que difícilmente se olvidan, por suerte: con el número 54 en su espalda, fue parte del plantel de primera del equipo de la Ribera que empató de visitante contra Banfield. Lucas y otros 20 juveniles fueron promovidos al plantel que disputa el Torneo Profesional de Fútbol, luego de que los 24 jugadores profesionales que quedaron eliminados de la Copa Libertadores en Brasil no fueran autorizados a disputar el torneo local por tener que cumplir aislamiento en el contexto de pandemia.
Como no podía ser de otra manera, la humilde familia Palma vivió con mucha emoción y alegría este esperado momento. A tal punto de que, como pudieron, compraron un televisor para poder ver el debut de su Lucas como parte del plantel de primera. “Nos emocionamos, lo vimos bien y estamos contentos porque los chicos jugaron muy bien”, destaca el padre de Lucas, Miguel Palma a Los Andes. Y hasta se ilusionó (sin dejar de lado la emoción) con la posibilidad de que su hijo pueda sumar los primeros minutos de juego en el equipo durante el partido que este martes Boca disputará frente a San Lorenzo en la Bombonera. Porque en el partido del sábado, Lucas no alcanzó a sumar minutos de juego. Aunque ya llegó al plantel profesional.
“Somos una familia de bajos recursos y vivimos en lo que se considera zona roja, en el barrio Libertad y cerca del canal Pescara. Pero, como pudimos, sacamos un televisor para poder ver el partido por internet. Siempre veíamos los partidos de Lucas (NdA: en las inferiores) por el celular. Pero ahora mi yerno, que tiene trabajo, pudo sacar un televisor para poder verlo mejor y en primera”, agrega Miguel con humildad.
Olga Susana Faur, madre de Lucas, compartió este fin de semana en su estado de WhatsApp la noticia de que habían comprado un televisor especialmente para poder ver a su hijo en el primer equipo de Boca y la conmovedora historia recorrió todo el país. “Fuimos a comprar un tele nuevo para verte, querido hijo Lucas”, escribió la madre junto a la foto en que se ve a toda la familia feliz y sonriente, con el TV detrás y el empaque de cartón del que acababan de quitarlo.
“Nos juntamos con mi hija y mi yerno en casa. Y fue realmente una emoción muy linda. Ahora a esperar el partido con San Lorenzo”, acota el papá del jugador xeneize. Miguel tiene 57 años y trabaja como podador de viña -en ello estaba trabajando durante la mañana de hoy, en un terreno ubicado sobre ruta 60-. Su esposa, Olga (mamá del futbolista) no tiene trabajo ya que padece epilepsia. “Intentamos que no salga de casa para nada, por las dudas que le pase algo”, explica su padre.
El humilde matrimonio tiene seis hijos: Victoria (31), Carlos (28), Maira Abigail -ya casada- (27), Rocío (23) y quien es pensionada y vive en la parte de atrás de la casa familiar, Lidia Beatriz (20) y el famoso de la familia, Lucas Palma, delantero de las inferiores de Boca y categoría 2003.
“La mayoría en la casa somos fanáticos de Boca, y yo soy uno de ellos. El sábado estábamos todos atentos, expectantes a ver si le daban unos minutos. Pero siempre acompañando y tranquilos, sabiendo que ya se le va a dar. Ojalá mañana pueda ser, contra San Lorenzo“, cuenta Carlos, el hermano mayor de Lucas y quien trabaja como metalúrgico. La hija de él es precisamente la ahijada de Lucas.
En febrero de este año, Lucas debutó en la reserva de Boca Junios y se convirtió en el primer jugador categoría 2003 en jugar allí.
“Siempre nos comunicamos con Lucas, y cualquier cosa en la que él tiene dudas, siempre habla con nosotros. Siempre se ha manejado con humildad, que es lo primero que le intentamos enseñar como padres”, agrega con orgullo Miguel.
A la espera del debut
Este martes, Boca recibirá a San Lorenzo por la fecha 3 del torneo de AFA. Al no haberse cumplido todavía los siete días de aislamiento sanitario, el plantel profesional de primera tampoco podrá disputar este partido, por lo que el técnico Miguel Ángel Russo volverá a alinear a los juveniles de las inferiores. Y los Palma se entusiasman con que Lucas juegue algunos minutos como titular.
“Mañana vamos a ver el partido de nuevo, por YouTube. No tenemos cable, pero así podemos verlo y esperar a que salga a la cancha”, sintetiza con la simpleza que lo caracteriza a él y a toda la familia.
Miguel y Olga Susana ya han viajado a Buenos Aires a visitar a su hijo y tienen ganas de repetir el viaje cuando puedan. “Los representantes de Lucas ya nos han dicho que podemos viajar cuando queramos a Buenos Aires y que ellos nos ayudan pagar el viaje”, resume el padre.
Mientras estuvo en Mendoza, Lucas palma jugó el en Club Eva Perón y hace cuatro años se fue a Boca. “Lucas es un excelente chico. Más allá de que vivimos en una zona complicada, él siempre ha sido un chico muy educado y con humildad, siempre. Cuando en casa faltaba algo o no alcanzaba, él salía a juntar aceitunas y a hacer changas. Muchas veces no teníamos para comprarle zapatillas. Pero él salía a trabajar para salir adelante”, concluye su padre.