El estreno del documental Francesco -sobre la labor pastoral del Papa Francisco-, el miércoles en el Festival de Cine de Roma, generó revuelo en todo el mundo y, en particular, dentro de la Iglesia Católica por los dichos del líder católico sobre los homosexuales y la familia, en particular la frase sobre su postura a favor de la convivencia civil.
“Las personas homosexuales tienen derecho a estar en la familia, son hijos de Dios, tienen derecho a una familia. No se puede echar de la familia a nadie (…). Lo que tenemos que hacer es una ley de convivencia civil. Tienen derecho a estar cubiertos legalmente. Yo he defendido eso”, es la frase que dio la vuelta al mundo.
Para sumar confusión, el cineasta ruso Evgeny Afineevsky llegó a asegurar que el Papa le hizo esas declaraciones directamente a él, pero se negó a aclarar cuándo las hizo.
La opinión del Papa, tal como se presentó en el documental, provocó exultación en los sectores más progresistas de la Iglesia, que vieron un giró inédito en la posición magisterial sobre el matrimonio entre personas del mismo sexo; en cambio, alarmó a los más conservadores.
Con el correr de las horas salió a la luz que en realidad las declaraciones del papa argentino en el documental fueron realizadas en mayo de 2019, en una entrevista con la periodista Valentina Alazraki, para la cadena Televisa de México.
En el análisis del video original se puede apreciar que el cineasta tomó extractos de la nota y los editó para armar una frase, incluso eliminado lo que Francisco dijo a continuación: “Eso no quiere decir aprobar los actos homosexuales”.
Desde la Iglesia mendocina, los obispos Marcelo Colombo y Eduardo María Taussig, como el resto de los prelados argentinos salvo monseñor Víctor Fernández (arzobispo de La Plata), hicieron silencio. Sin embargo, a través de los voceros de los obispados le bajaron el tono a la polémica, remarcaron que la doctrina sigue intacta y dejaron en claro que están convencidos de que hubo un enfoque sensacionalista del tema.
“Lo primero que hay que decir es que las frases que se han publicado son falsas o maliciosas. No sólo están fuera de contexto sino que están en contra del contexto. No es lo que predicó el Papa”, sentenció el padre José Antonio Álvarez, vocero del obispado de San Rafael. “El Papa no autorizó ninguna clase de unión o matrimonio homosexual porque la doctrina Católica está clara y este mismo Papa la ha reafirmado”, agregó.
Marcelo De Benedectis, vocero del Arzobispado de Mendoza, se sumó a los dichos de su par, pero agregó que la declaración de Francisco durante la entrevista “no tiene fuerza vinculante como doctrina”, ya que “no se trata de un documento eclesial, de la palabra oficial del Papa”.
Para desterrar la confusión , Álvarez explicó: “En ese documental se hace alusión a dos temas muy distintos, y uno es la participación en la vida de la familia de las personas homosexuales. El Papa responde a una pregunta puntual y dice que no se deben expulsar de la casa. Toda persona tiene derecho a una vida familiar, deben ser contenidas de la misma manera y con especial cariño”.
Para cerrar, y dirigiéndose a los fieles, el sacerdote recordó que “se trata de una película y se debe ver así. Lo que dice y enseña el Papa está en los documentos oficiales de la Iglesia y allí no existe engaño”.
La mirada de algunos referentes católicos
El sacerdote José Álvarez, vocero de la diócesis del sur, insistió en que la postura de Francisco es la misma de siempre en este tema. “Ya lo venía diciendo antes de ser Papa, a estas situaciones de hecho que no son sólo de las parejas homosexuales, sino de todo conviviente que no tienen un vínculo matrimonial o de sangre, por esa razón sufren déficit civiles”.
Y añadió: “De todo eso no se puede decir para nada que el Papa aprueba las uniones homosexuales, no, señor. El matrimonio, lo ha dicho claramente, es entre varón y mujer, así está en la naturaleza, así lo hizo Dios y es el único matrimonio que se reconoce”.
Para reafirmar la postura ,el padre Álvarez sostuvo que “no se acepta el mal, por lo cual no se puede afirmar que esas uniones sean matrimonio, pero sí se ha de buscar el bien posible, como tratar esos hechos concretos del modo más digno posible”.
Para Mariano Pérez, profesor de Economía e integrante de un grupo de matrimonios católicos en General Alvear, el Papa hizo referencia "a una cuestión política opinable, que tal vez podría ser aceptada como un mal menor, antes que poner a un mismo nivel el matrimonio varón-mujer, con la unión de personas del mismo sexo. Luego cuestionó que “para no generar confusión, tendría que haber aclarado que esa unión civil no implica la aprobación de la Iglesia del estilo de vida homosexual”.
Fabián Zucarello, del Movimiento Apostólico de Schöenstatt, fue contundente: “El Papa no cambia su pensamiento ni la doctrina de la Iglesia Católica. El matrimonio en la concepción cristiana sólo es posible en la unión entre un varón y una mujer, abierto a la vida y a la educación de los hijos. Cualquier otra unión tendrá otro nombre”.