Los especialistas aseguran que cada vez más personas serán diagnosticadas con insuficiencia cardiaca (IC), diagnóstico vinculado a la mayor sobrevida de las personas y a las comorbilidades asociadas. De acuerdo a las estadísticas, es una de las principales causas de muerte en el mundo e incluso causa aún más que el cáncer en adultos mayores.
“Una de cada cuatro personas en Argentina fallece por un problema cardiovascular y 35% de las muertes prematuras, es decir, en mayores de 65 años se produce por problemas cardiovasculares”, sostuvo el doctor Miguel González, jefe del servicio de cardiología del sanatorio Finochietto de Buenos Aires y ex presidente de la Sociedad Argentina de Cardiología.
Señaló además que en el país, dentro de las patologías cardiovasculares ocupa el primer lugar. “No es una pavada, es a veces peor que el cáncer”, enfatizó. Esto en referencia a que según detalló para el cáncer hay mayor accesibilidad a medicamentos, más tratamientos e incluso algunos tipos de cáncer tienen mejor sobrevida.
Qué es la insuficiencia cardíaca
La Insuficiencia Cardíaca (IC), es una condición grave que pone en riesgo la vida de las personas. Cuando existe este diagnóstico, el corazón tiene limitada su capacidad de bombear suficiente sangre, y por lo tanto, oxígeno para satisfacer plenamente las demandas metabólicas del cuerpo.
Tiene impacto en la calidad de vida de las personas, ya que dejan de poder hacer actividades que antes realizaban e incluso se ven impedidos de trabajar.
Además, terminan frecuentemente internados, a tal punto que uno de cada 5 pacientes, tras el alta, vuelve a requerir internación en torno a los 90 días posteriores, detalló el profesional.
“Es una enfermedad discapacitante, progresiva y que no tiene cura. Sufre el paciente, sufre la familia, la salud pública y la economía del país, porque son personas que en vez de estar produciendo están internadas”, dijo el cardiólogo.
La IC en números
Las enfermedades del corazón son la primera causa de muerte en el país. Según datos de estadísticas vitales 2020 del Ministerio de Salud de la Nación a ellas corresponden el 20% de los fallecimientos.
Después de los 75 años, las enfermedades del corazón ocupan el primer puesto entre las causas de muerte, por encima de los tumores. Esta categoría refiere a patologías o cuadros como enfermedades hipertensivas, infarto agudo de miocardio e insuficiencia cardiaca.
Según esa misma fuente, la insuficiencia cardíaca causa en Argentina unas 24 mil muertes al año. El impacto es mayor a medida que aumenta la edad, si se toman en cuenta ambos sexos, se incrementa mayormente a partir de los 60 años y mucho más marcadamente luego de los 75.
En Mendoza en 2020, hasta donde están los últimos datos procesados, la insuficiencia cardíaca se cobró 861 vidas, detrás del infarto agudo de miocardio con 904. El ingreso del Covid lo posicionó en el primer lugar, por lo que la IC quedó en cuarto lugar entre las principales causas de muerte en la provincia, sobre un total de 16.559. Es el 5,2% del total de fallecimientos notificados ese año, un número relativo ante el ingreso de la pandemia que transgredió los datos habituales.
El año anterior, con datos de un contexto de “normalidad”, la insuficiencia se había posicionado tercera, detrás del infarto agudo de miocardio, primera causa, y la neumonía, segunda. Fue la causa de 754 muertes, es decir 5,26% sobre un total de 14.336 defunciones notificadas ese año. Los años previos también fue tercera causa.
Más incidencia
La mayor incidencia de la insuficiencia cardíaca se relaciona con el incremento de la edad poblacional y la mayor sobrevida de los pacientes con enfermedades cardiovasculares, según un publicación del Registro Argentino de Insuficiencia Cardíaca Aguda.
“En mayores de 65 años afecta a 1 de cada 10 personas”, apuntó el cardiólogo Eduardo Perna.
En el mismo sentido, un informe de la Sociedad Argentina de Cardiología junto a la Federación Argentina de Cardiología expresa que la insuficiencia cardíaca crónica (ICC) afecta a entre el 2 y 3% de la población general, pero a más del 10% de los mayores de 70 años. “Es la vía final común de la mayoría de las enfermedades cardíacas no tratadas adecuadamente. Afecta marcadamente el pronóstico; la morbimortalidad relacionada es alta y aumenta con la edad”, expresa.
En la investigación “Insuficiencia cardíaca crónica en Argentina”, publicada este año, las entidades explican que las hospitalizaciones por esta causa son muy importantes: corresponden a las etapas más graves y potencialmente mortales, y determinan la mayor parte de los costos directos e indirectos. Sin embargo, también señalan que la mayor parte de la vida del paciente es ambulatoria; el comportamiento diario adecuado, la adhesión a los estándares recomendados y el acceso rápido al sistema de salud determinan la evolución y previenen hospitalizaciones.
En este relevamiento realizado por 100 cardiólogos en el país, que incluyó 6% de casos de Mendoza, evaluó casos de 1.004 pacientes. Se pudo observar que una gran proporción tenía comorbilidades: “Poco más de dos tercios de los pacientes eran hipertensos y casi un tercio tenían diabetes; más de la mitad tenían, además, otras comorbilidades significativas”, concluye.
La mayoría son varones y la edad promedio de los pacientes abordados, varía entre los 72 y los 74 años, según el estudio.
Abordaje de la IC
Lo que observan los médicos es que hay dos grandes desafíos en cuanto al abordaje de la IC, que requiere varios tratamientos en paralelo. Uno de ellos es la accesibilidad a los medicamentos, ya que advierten que no todos los pacientes la tienen y menos en el sistema público.
Otro punto es la adhesión del paciente al tratamiento ya sea porque no lo consigue o simplemente porque no lo toma como se le indica.
Perna destacó algunos aspectos fundamentales a tener en cuenta para la prevención y acompañamiento de las personas con IC.
Destacó que es sustancial que reciban un buen soporte y acompañamiento y que incluso hay programas para ello. Además es necesario mantener una alimentación saludable y equilibrada y realizar actividad física, tanto para prevenirla como para una mejor evolución tras su diagnóstico. El control de la salud así como mantener al día el calendario de vacunación fueron otras de las sugerencias.
Entre las causas de la IC se cuentan problemas en válvulas y arterias coronarias, presión arterial elevada, enfermedad de chagas y otros aspectos que pueden propiciarla como la diabetes y la obesidad.
Nuevo tratamiento
El tema fue abordado en una jornada sobre al respecto realizada ayer en Buenos Aires por el laboratorio Boehringer Ingelheim y a la que fue invitado Los Andes. Allí se refirieron a la aprobación por parte de la Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (Anmat) del uso de “empagliflozina” en adultos para el tratamiento de la insuficiencia cardiaca crónica sintomática. “Esta autorización convierte a esta molécula en el primer y único tratamiento autorizado para todos los adultos con insuficiencia cardiaca crónica sintomática, destacaron desde la empresa. Es un medicamento que ya se usa para la diabetes de tipo 2 y que ha demostrado datos indicativos de reducción de muertes de origen cardiovascular en enfermedad cardiovascular concomitante.
