Hasta el 31 de diciembre de 2020, el total de fallecidos por Covid-19 en la provincia, según los datos oficiales, alcanzaba las 1.240 víctimas fatales. Sin embargo, después de más de seis meses, con los datos acumulados hasta el reporte oficial del 27 de julio, el número aumentó a 1727, lo que representa un 28% más.
Durante el mes de julio quedó evidenciado el gran retraso en la carga de datos por parte de la provincia en el Sistema Nacional de Vigilancia en Salud. De los 624 muertos que reportó Mendoza en lo que va del mes, 304 ocurrieron entre agosto y diciembre del año pasado.
El detalle marca que, entre el 1 y el 27 de julio, se notificaron en el sistema nacional: 58 muertos, de agosto; 84 (septiembre), 132 (octubre), 23 (noviembre), y 7 (diciembre).
Así se confirma una de las sospechas más fuertes que se esgrimían al intentar dar respuesta a un aumento sostenido de la tasa de letalidad en la provincia. Y ahonda la sensación de falta de fidelidad de los datos y correlación en relación a uno de los principales indicadores de la situación epidemiológica.
La información trascendió tras una publicación del diario La Nación donde se expone la respuesta del Ministerio de Salud de Mendoza ante la consulta sobre la demora excesiva en la carga. “Con respecto a la carga en el SNVS, desde epidemiología y bioestadísticas, lo que se está haciendo es reparar las estadísticas vitales basadas en los certificados de defunción. A medida que se van analizando certificado por certificado se van detectando y cargando en el SNVS, no solo Covid sino de todas las patologías de 2020″, argumentaron desde el ministerio local, según La Nación.
Desde la Dirección de Epidemiología de la provincia explicaron que se trata de un procedimiento de constatación y reactualización de datos solicitado por Epidemiología de Nación. Y que “sí se van a ver traducidos en los datos al 2020, por ejemplo modificando la tasa de letalidad que aumentará en el acumulado del año pasado”.
“Siempre el análisis de estadísticas vitales es de un año al otro. La reparación es algo coordinado con el Ministerio de Salud de la Nación, y es algo que se da en todas las provincias. Es un proceso ordinario el análisis de certificados de defunción que nos da el registro civil, justamente para evitar que haya algún desfasaje con las cargas en el SNVS que hacen los hospitales que a veces, por diversas situaciones, no terminan impactando en el sistema”, continuó la explicación.
Sin embargo, la situación evidenciada en las estadísticas de Mendoza no se replica en ninguna de las otras provincias del país. Según el relevamiento del DataSet que publica cada noche el Ministerio de Salud de la Nación, se desprende que de los 3861 muertos ingresados por Mendoza en el Servicio Nacional de Vigilancia, 94 fueron notificados, al menos con 10 meses de demora, 205 tiene una demora superior a 200 días y 69, más de 100 días.
De hecho, la provincia ostenta uno de los récords más polémicos: el caso de un fallecimiento cuyos datos ingresaron a las estadísticas nacionales con 340 días de retraso. Un deceso que ocurrió el 1 de agosto del 2020 recién fue notificado el pasado 7 de julio. Se trata de un hombre de 76 años.
En tanto, desde la cartera liderada por la ministra Ana María Nadal expresaron que “el análisis certificado por certificado es para tener los datos correctos y ser transparentes totales en la información. Por eso el trabajo profundo de bioestadísticas y de todos los equipos de epidemiología”.
Buenos Aires, un caso similar que fue revertido
A fines de septiembre luego de cuatro jornadas con altos números de muertos en la provincia de Buenos Aires, a raíz del ingreso al sistema de fallecidos de hasta tres meses, la administración de Axel Kicillof presentó una nueva herramienta para el registro de información de la Covid-19 pasó de 8.983 muertos a 12.566.
“Con el desafío de medir la pandemia en tiempo real, comenzamos a utilizar información proveniente de tres bases de datos (SISA, SIGEC y el Registro de las Personas). De esta manera, recategorizamos los datos de mortalidad por coronavirus y evitamos el subregistro de los mismos, un problema existente en todos los países del mundo”, había explicado el ahora exministro de Salud bonaerense Daniel Gollán.
“La demora en la carga de datos en pandemia es algo mundial. No solo de acá. El dato de los muertos lo tenemos que tener para poder evaluar cómo vamos en la pandemia. Eso no lo vemos reflejado por la demora en la carga de datos”, había explicado Gollán, y agregó: “Puede pasar que cuando se produzca el último muerto de la pandemia, vamos a seguir registrando. Eso nos da una visión distorsionada”.
Tras la corrección, la demora en la provincia de Buenos Aires quedó por debajo de la media nacional (15 días) con 13 días de demora.