Su abuela materna, Nilda Eraso, fue Reina Nacional de la Vendimia en 1958 y la última soberana nacional oriunda de San Rafael fue la recordada Cecilia Fornara, hace 26 años. Ahora, toda la esperanza del pueblo sureño está puesta en María Sol Indiveri.
“No siento presión, siento que tenemos mucha fe. Si tengo que ser reina nacional lo seré, si no, no. Soy más devota del destino y creo mucho en las buenas energías”, dice, relajada, la nueva soberana de San Rafael, elegida por la gente el pasado 12 de febrero en la fiesta “El origen”.
María Sol tiene 22 años es “agua mansa” por afuera y un “tsunami” puertas adentro. Hace de todo, vive planificando el paso siguiente que dará y se las ingenia para disfrutarlo con sus seres queridos. Es kinesióloga (trabaja en rehabilitación con niños autistas y con adultos mayores), estudia inglés, es una avezada deportista (practica Kayak y jockey sobre césped) y es profesora de danzas flamencas, una pasión que atesora desde sus 6 años.
Pero María Sol tiene aún más sueños y más planes en el corto y largo plazo. Solo por mencionar algunos, anhela portar la corona nacional de la Vendimia, quiere empezar la licenciatura en kinesiología este año; hacer las residencias en el hospital pediátrico Humberto Notti; también quiere casarse y tener hijos. Esto último, aclara, no será este año.
“Soy curiosa. Pero también soy muy tradicional, como la vendimia”, confiesa risueña esta reina que nació un 8 de marzo bajo el signo de Piscis, con el cual se siente identificada.
“Soy tranquila, muy introvertida y de muy bajo perfil. Recién cuando fui reina distrital y ahora, como reina departamental, empecé a descubrir una faceta mía más social que desconocía, como hablar con los medios, o con mucha gente todo el día. Algo que no imaginé hacerlo”, reflexiona.
Un mirador en las dunas de El Nihuil y capacitación en primeros auxilios
Como no podía ser de otra manera, María Sol presentó, no uno, sino dos proyectos sociales cuando se postuló para ser reina. Uno quedó asentado apenas se postuló como representante del distrito El Nihuil y el otro se propuso al inscribirse como soberana departamental.
El primero consiste en la creación de un pequeño camino asfaltado que dé acceso a un mirador en las dunas de ese lago artificial. Actualmente el acceso hasta allí es un peligro, sobre todo, por las motos enduro que allí circulan. “La idea es crear una pequeña calle tipo mangrullo para poder tener un buen acceso al mirador porque hoy es muy difícil llegar hasta ahí”, agrega Sol, quien asegura que la obra ya tendría el visto bueno en la municipalidad y podría desarrollarse este mismo año.
Si bien la soberana vive en Las Paredes, el Nihuil es su segundo hogar. Asegura que cada fin de semana libre que tiene con su familia, el destino favorito es ese embalse. Allí aprendió a andar en Kayak, deporte que comparte y disfruta junto a su hermano Matías.
En tanto, el segundo proyecto que presentó la joven kinesióloga está vinculado a su profesión, que es la salud. Consiste en brindar charlas informativas y de concientización sobre Primeros Auxilios y Reanimación Cardiopulmonar (RCP) en diferentes instituciones, privadas y públicas de San Rafael.
“Creo que la mayoría de la población no tiene la técnica específica para salvar vidas. Toda la comunidad debería saber de primeros auxilios y de RCP”, sostiene.
Sol cree que es fundamental abordar las charlas con un grupo interdisciplinario para que la información llegue clara a la población en general. Asegura que el disparador de su proyecto han sido las numerosas veces que presenció maniobras en las piletas de hidroterapia donde trabaja. “Me doy cuenta que todos deberíamos tener más herramientas para ayudar”, sentencia María Sol.
Lejos de casa
La reina dice estar feliz por estos días, pero admite que extraña todo de San Rafael desde que llegó a la Ciudad de Mendoza el 14 de febrero, para sumarse a la cargada agenda vendimial. “Ha sido difícil adaptarme lejos de mi familia y de mi novio”, jura.
Es que la profe de Flamenco nació y creció en San Rafael. Allá vive con su mamá Gisela y su papá Daniel, y comparte mucho tiempo con su novio, automovilista y jugador de pádel, con quien mantiene una relación desde hace 8 años.
Con su abuela Nilda también tiene una relación especial. Es quien acompaña por estos días a María Sol a transitar los burbujeantes días de vendimia, con el plus de haber transitado los mismos senderos hace unas décadas. “Mi abuela me acompaña más como abuela que como reina con mandato cumplido. Solo me dice que me relaje y disfrute todo. Ella está más en ese papel y me encanta”, destaca la soberana.
Y una suerte de “madrina vendimial” para la joven sanrafaelina es María Cecilia Fornara, la Reina Nacional de la Vendimia en 1998, oriunda de ese departamento. Es que antes de la elección departamental de este año, fue Fornara quien se contactó con María Sol para felicitarla y ponerse a disposición, además de brindarle algunos consejitos, por ahora, secretos. “Ceci me dijo que disfrute de ser yo misma, que eso es lo que cuenta”, relata.
Los hermanos de María Sol son un capítulo aparte. Si bien son bastante más grandes que ella, son su gran fuente de alegría y los responsables de que Sol espere con ansias los asados familiares del domingo (ver despiece). Nicolás tiene 34 y Matías 31.
Ambos están acompañándola en esta experiencia que la reina vive, también, como “una enorme responsabilidad”. Esta vez es ella quien deja a su tierra por un rato, pero con la esperanza de llevarle a su familia y a su pueblo la décima corona nacional.
Coronada de historia y futuro
Parafraseando el nombre del espectáculo central de la Vendimia, le preguntamos a cada candidata: ¿Cuál es el momento de su historia personal que la ha marcado? y ¿Qué sueña para su futuro?
“Creo que hubo un momento en donde tuve que crecer a la fuerza y adaptarme a algo que no me gustaba. Fue cuando yo tenía 11 años y mis dos hermanos mayores se fueron a vivir a Mendoza. Si bien nos llevamos más de diez años de diferencia yo siempre fui muy apegada a ellos. Así que tuve que aprender a ser como una hija única. Realmente los extrañaba un montón. Por suerte ambos han vuelto a San Rafael y hemos vuelto a compartir muchas cosas juntos y en familia”.
“Un sueño que ya cumplí era tener una banda de reina departamental. El otro sueño también es parte de esta historia tradicional que es la vendimia: poder ser Reina Nacional.
Fuera de Vendimia me encantaría conocer España. Amo el baile flamenco y lo bailo desde los 6 años. Me gustaría conocer esa cultura, en lo posible, antes de casarme y de formar una familia (se ríe). Sí, soy muy tradicional, como la Vendimia”.
Ping pong real
-¿Cuál es la mejor serie en streaming?
-Grey´s Anatomy es mi serie favorita. Tiene mucha actividad, pasan muchas cosas. Como trata temas de salud y en cada episodio hay alguna patología diferente me engancho siempre. Algunas enfermedades conozco, otras no. Además, más allá de que trata temas de salud, es una serie que está increíblemente bien hecha.
-¿Qué canción encabeza hoy tu playlist?
- ¡Uy! Escucho de todo. Eso sí, a pesar de que escuché toda mi vida música flamenca para ensayar y bailar no tengo nada de eso hoy en mi playlist. En un momento escuché a la India Martínez, pero ahora estoy escuchando a la banda Morat, mucho cuarteto y algo de rock, como Las Pastillas del abuelo.
-¿Cuánto tiempo le dedicás a tus redes? ¿Cuál preferís?
- Como te contaba, he sido muy introvertida, por lo tanto, no he sido muy activa en mis redes. Casi no las usaba, cada tanto subía algo. Muy perfil bajo he sido. Ahora con Vendimia las estoy usando más, sobre todo, para comunicarles a la gente de San Rafael todo lo que estoy viviendo junto a las otras reinas.
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