Ya sea que se haya podido salir de vacaciones o no, el verano tiene particularidades y conductas asociadas que pueden implicar riesgos. para que todo sea disfrute, algunas recomendaciones sobre cómo prevenir y cómo actuar ante una situación de riesgo.
El Ministerio de Salud de la Nación da algunas recomendaciones en referencia a los 5 accidentes más frecuentes en esta época del año.
“En general y para cualquier excursión, avisá sobre lo que planeás hacer. Si vamos a caminar por zonas alejadas, o salir en bote a pescar, comentemos con alguien nuestro rumbo, la cantidad de personas y el horario de regreso previsto. Puede ser vital para enviar ayuda a tiempo, en caso de necesitarla”, señala.
Además, recomienda llevar de la mano a niños, niñas y personas que necesitan asistencia, al cruzar las calles y en medio de aglomeraciones.
Advierte sobre entornos en los que hay que tener particular cuidado para evitar lesiones no intencionales, que pueden resultar muy graves: la ruta, el agua y la playa.
Para evitar accidentes viales
-Usá cinturón de seguridad y, si manejás, nunca tomes alcohol.
-Las chicas y los chicos siempre tienen que viajar atrás y deben utilizar siempre un sistema de retención infantil (comúnmente llamado sillita), acorde al vehículo y la edad.
-Usá casco para andar en bici, moto, cuatriciclo, etc.
-No circules por la playa en vehículos motorizados.
-No permitas que chicos y chicas conduzcan vehículos motorizados en ningún lugar ni circunstancia (aunque no haya otras personas, es muy peligroso para sí mismos).
-Evitá caminar por la banquina de la ruta. Si fuera imprescindible hacerlo, usá ropa refractaria o fluorescente para ser bien visible, caminando lo más lejos posible de la banda asfáltica y en sentido contrario al tránsito del carril más cercano
Para evitar accidentes en el agua
-Asegurate de que siempre haya una persona mayor de edad y responsable que sepa nadar controlando a los niños y las niñas.
-Evitá que niños, niñas y adolescentes jueguen o se sumerjan en aguas no autorizadas o desconocidas.
-Enseñales a los niños, niñas y adolescentes a nadar y a respetar las señales de peligro.
-Recordá que los y las más pequeños/as pueden ahogarse en poca agua y en pocos minutos.
Para evitar quemaduras de sol
-Usá siempre protector solar, renovándolo con frecuencia según indicaciones del envase. (Ver Cuidados del sol)
-Para prevenir infecciones que se transmiten por el agua:
-Toda pileta para natación o recreo necesita cloro (también la de lona) para que no transmita enfermedades. Se agrega siempre a la noche (cuando ya no se usa), en cantidad adecuada. Asesorate (porque el exceso de cloro también es peligroso).
-Evitá tragar agua.
-Nunca te bañes en agua estancada.
-Siempre lavate las manos con agua segura y jabón después de ir al baño.
-Para evitar infecciones en los oídos, secátelos bien después del baño. Podés usar una toalla de manera suave y te aconsejamos inclinar la cabeza hacia los lados para que los oídos queden en posición que permita que el agua salga.
Cómo actuar si estás en la playa y se desata una tormenta eléctrica
-Salí del agua.
-Ponete ropa y calzado secos.
-Andate de la playa.
-No te refugies bajo un árbol, un paraguas o una sombrilla.
-Alejate de los objetos metálicos.