De acuerdo a las primeras estimaciones más de 460.000 turistas extranjeros llegaron a la Argentina en las dos primeras semanas de enero, lo que significa un incremento del 33,5 por ciento respecto a los arribos registrados en el mismo período del año anterior. El gasto total estimado aumentó un 10,5 por ciento, ya que superó los 312 millones de dólares.
Los países con más participación del total de viajes de turistas fueron los limítrofes: Brasil (23,6 por ciento), Uruguay (14,3 por ciento) y Chile (12,7 por ciento). A continuación, se ubicó Estados Unidos, con 11,1 por ciento y un total de 51.403 turistas.
La vía terrestre fue la de mayor crecimiento respecto a igual período del año anterior, con un total de 217.155 turistas, que representó una variación interanual del 36,9 por ciento. La fluvial/marítima se incrementó un 29,5 por ciento y la aérea, un 31,1 por ciento.
Con respecto a la llegada de cruceros, la temporada 2023-2024 será récord, con un crecimiento del 30 por ciento de turistas y del 8 por ciento de recaladas sobre la temporada anterior, que implica más de 700 recaladas y 750 mil pasajeros en todo el país.
A su vez, la Argentina superó las expectativas de la ONU Turismo en cuanto a la recuperación de los niveles prepandemia, con un 97 por ciento en comparación con un índice mundial del 88 por ciento, tal como surge de la última edición del Barómetro de Turismo 2023.
Mendoza, “los turistas extranjeros están salvando el verano”
Según publica Los Andes, para el sector turístico de Mendoza, lo que va de enero es una de las peores temporadas de la última década. “La temporada está muy mala” aseguró alguien que se dedica a la actividad. Es algo que puede verse plasmado en los números y más allá de esto, en el tipo de consumos.
Es que por un lado, la ocupación está muy por debajo de la media en la misma época. Por otro lado, en un escenario socioeconómico complicado, la conducta de los turistas ha cambiado para optar por estadías más cortas, servicios más económicos y menos consumos. En este contexto, lo que observan quienes trabajan en el sector formal es que hay un aumento notorio de la demanda de servicios informales, que han crecido notoriamente tanto en alojamientos como en transporte. Es que dada justamente su informalidad, ofrecen alternativas más económicas a quienes buscan ahorrar sin dejar de tener sus vacaciones. En tanto, a nivel oficial aseguran que “los turistas extranjeros están salvando el verano”.
Según la evaluación de la Cámara de Turismo de Mendoza, en lo que va de enero se ha registrado un descenso de 25% en la ocupación respecto de la primera quincena de 2023, aunque esta fue muy buena. La actual está entre el 45 y el 50% para la entidad. Para el gobierno, en 58%. Pero la ocupación promedio para enero entre 2009 y 2023 es de 62% para toda la provincia, según datos del Observatorio del Ente Mendoza Turismo. Desde 2015, solo hubo un registro igual (58%) en enero de 2019 y 2020, sin tomar en cuenta 2021 y su excepcionalidad por el parate de la pandemia. El resto, por encima de esa proporción.
Asimismo, no puede soslayarse que la temporada viene floja en todo el país, incluso en los destinos privilegiados en esta época como la costa atlántica, donde se habla de una baja de de 40 puntos que preocupa: en la Secretaría de Turismo, Marketing y Desarrollo Sostenible de La Costa afirman que se pasó de casi 100% de reservas para enero 2023 a 60% este año.
Por eso, desde el Ministerio de Turismo de Mendoza advierten que ante un escenario complejo, impactado por el contexto económico del país, a Mendoza no le está yendo tan mal. De hecho, incluso advierten que el turismo extranjero, pese a la baja de chilenos, está “salvando el verano”.
LOS EXTRANJEROS
Lo que reconocen es que la temporada tiene sus propias particularidades. Para Beccaceci, se logró llegar a 30% de turismo extranjero y ahora bajó a 20%. Reconoció la incidencia del turismo receptivo del exterior, “al haberse instalado vuelos directos”, apuntó. La devaluación ha jugado también un rol sustancial en atraer extranjeros que hacen otro tipo de consumos.
“Está floja la temporada, en toda la Argentina, pero a Mendoza le va mejor que al resto porque tiene turistas extranjeros”, resaltó. Dijo que un escenario similar tiene la Patagonia o en particular Bariloche. Reconoció la conectividad aérea como elemento importante y virtud para la provincia. A esto agregó atractivos como una buena gastronomía y en particular los naturales, especialmente la montaña. Destacó que la primera quincena de enero está a pleno la temporada en el Aconcagua, que viene muy bien para hacer cumbre, trekking corto y largo, mejor incluso que en la prepandemia.
“En un contexto nacional complicado y más vinculado con los atractivos propios que busca el turista en verano, como la combinación playa y sol, Mendoza compite con naturaleza, montaña, buena gastronomía y vida nocturna, en ese sentido la evaluación es positiva”, afirmó la funcionaria.
El caso de los chilenos es particular: tras un vendaval de visitas, particularmente interesados en aprovechar para hacer compras con un cambio beneficioso, el aumento del dólar en Argentina tras el cambio de gobierno nacional le restó atractivo y, como dijo Testa, se pasó de aquella demanda aumentada artificialmente a un intercambio más normal.