La bebé de tan sólo días de vida que fue abandonada en Ciudad, está al cuidado de una familia que se encuentra en lista de espera para adoptar. La pequeña Luz fue dada de alta del hospital Notti hace dos semanas en buenas condiciones de salud tras haber permanecido un tiempo a la intemperie en la puerta de una vivienda de la manzana 23 del barrio Alto Mendoza, donde la encontró la propietaria a las 20.35 del jueves 10 de agosto.
Desde entonces, su destino sufrió un cambio de rumbo que, si todo prospera como podría suponerse, la llevará al cobijo de una familia que la abrace y la acompañe.
Aquella noche, Soledad Ripoll escuchó que golpeaban a su puerta y, al salir, la encontró envuelta en una mantita de color rojo. Pudo ver un vehículo que se alejaba a gran velocidad pero no hubo más detalles. Desde entonces, la Justicia ha tratado de encontrar a su familia pero no ha tenido éxito. No hay rastros.
Es el procedimiento que debe seguirse para dar el siguiente paso: pasados 30 días se abre la posibilidad de que la pequeña ingrese en condición de adoptabilidad.
Por el momento, el Registro Provincial de Adopción (RPA) no ha sido notificado al respecto, pero se espera que sea la próxima instancia dadas las condiciones. La familia con la que se encuentra ya había iniciado el proceso para lograr su ansiado sueño de ser padres, por lo cual ya están inscriptos en dicho registro. Por ello puede suponerse que hay altas posibilidades de que esas vidas puedan cruzarse para darle un final feliz a una historia que comenzó con dolor.
Una vez que el juez de Familia confirme la adoptabilidad, comenzará el proceso para hacerla efectiva. Desde el Ministerio Público Fiscal aclararon que no se puede asegurar oficialmente que la beba quede con esta familia porque no hay nada confirmado pero, como se dan las cosas, es posible.
El hecho que marcó su destino
En el hospital Notti, Luz como la llamaron los médicos y enfermeros, permaneció en Neonatología. Allí recibió los cuidados necesarios, aunque desde que ingresó aseguraron que se encontraba en buen estado de salud.
El equipo médico le dio, además, los mimos que necesitaba y al darle el alta aseguraron que estaba muy bien. Sin embargo, por tratarse de un caso judicializado, no pueden darse demasiados detalles.
Al llegar se estimó que Luz tenía entre 3 y 7 días de vida. Con tan corto tiempo en este mundo debió afrontar la hostilidad del frío envuelta en aquella manta roja que la abrigaba en la puerta de esa casa. Tras el golpe en la puerta, el llanto de la pequeña alertó a Soledad sobre su presencia.
Fue entonces que se llamó al 911 y en dos móviles llegaron al lugar efectivos de la Unidad Especial de Patrullajes de Capital. El Servicio de Emergencias Coordinado fue el primero en intervenir y así constatar su estado de salud antes de derivarla al hospital pediátrico de Guaymallén.
Durante este tiempo los investigadores revisaron cámaras de seguridad para hallar rastros de quien había abandonado a la bebé. Desde el Centro de Monitoreo de Capital y de Las Heras buscaron allí respuestas que no hallaron.
La Oficina Fiscal 2 de Capital dio intervención a los Equipos Técnicos Interdisciplinarios (ETI) y al personal de la Unidad Investigativa de Capital para dar con los padres de la menor. Hasta el momento, no se ha podido dar con su familia. Desde la Justicia se ha explicado que se trataría de un caso de abandono de persona, un delito con penas que van de los dos a los seis años de cárcel.
Ahora, el caso está en manos de la Justicia de Familia, que será la que disponga los pasos a seguir y la que, de no haber cambios, dispondrá la adoptabilidad. Es entonces cuando interviene el RPA, que trabaja con la Asociación Voluntarios Mendoza (Avome). Son ellos quienes buscan una familia temporaria.
En una nueva instancia, serán quienes trabajen para llevar a Luz al hogar definitivo que le dará cobijo.