Muchos niños que acuden al merendero “Huellitas de amor”, situado en el Barrio Pedro Molina, de Guaymallén y fundado por una mamá de siete hijos, esperan ansiosos la Navidad en medio de numerosas carencias.
Noelia Poblete, quien comenzó con esta iniciativa solidaria, percibe en estos días la desesperación de algunas mamás frente a las necesidades. También recibió cartitas de los chicos para Papá Noel y, así, puso manos a la obra.
“Estamos pasando una situación muy difícil porque prácticamente se han dejado de recibir provisiones. Le pedimos a la gente que nos dé una mano”, dijo, para mencionar las necesidades del día a día en el comedor y también de cara a los festejos de fin de año.
“Desde lo básico, que son los alimentos, a juguetes, ropa, zapatillas, vajilla, mobiliario, necesitamos todo. Tenemos buena voluntad pero nos faltan elementos esenciales”, se sinceró, en diálogo con Los Andes.
Más allá de que en el propio domicilio se reciben donaciones, se abrió una cuenta para quienes puedan transferir una suma de dinero. “Todo suma, llega Navidad y Reyes y nuestro deseo es que nadie se quede sin festejo ni regalo. Estamos en la cuenta regresiva para poder reunir lo necesario”, dijo Noelia.
Noelia armó el merendero tiempo atrás en su propio terreno observando a los muchos chicos con el estómago vacío en medio de la pandemia.
Así, buscó a madres con manos dispuestas y comenzó a visitar negocios vecinos para obtener donaciones, además de ir casa por casa para evaluar la cantidad de niños que había en el barrio y sus situaciones particulares.
En la humilde casa donde vive con su madre y un puñado de niños, una tarde hizo rosquillas para ofrecer con té a los niños de la cuadra.
Aquel día ofreció té. Poco después empezaron a llegar más y más chicos que requerían ropa y abrigo incluso un vaso de leche.
Noelia finalmente se convirtió en la fundadora y líder “Huellitas de amor”, que surgió entre muchos otros que se abrieron durante estos difíciles tiempos de cuarentena.
Sin embargo, para continuar con la actividad sigue necesitando la ayuda de todos.
Por eso es esencial contar con alimentos no perecederos, mesas, sillas, vajilla, ropa, zapatillas, fruta, carne, y sobre todo juguetes y golosinas para Navidad y Reyes.
“La convicción es firme y lo que planeé en mi cabeza no parará. Pero insisto, es fundamental que nos ayuden. Sabemos que mucha gente tiene lo que pedimos en sus casas y para nosotros sería muy importante”, dice.
Sueña con cerrar un espacio para contener a los muchos niños que acuden para su merienda.
Noelia es mamá de Aisha, Bautista, Ian, Sheila, Alan, Lautaro y Brandon, que tienen entre 5 y 16 años. “Todavía estoy esperando una casa que no llega, aunque ya me he apuntado. Soy tan pobre como tanta gente que viene a mi casa, es solo que tuve una idea y me atreví a encararla”, había dicho en una anterior entrevista.
A tener en cuenta
¿Donde está? El merendero está ubicado en Bravo 3345 –entre Bolivia y Ecuador-, cuadra 24, casa 3 de B ° Pedro Molina 2, Guaymallén.
¿Que necesitan? Alimentos de todo tipo (no perecederos pero también frutas, carne, verdura y leche); tablones, mesas, sillas, vajilla, ropa, útiles escolares y material de construcción para cerrar un espacio.
¿Cómo donar? El contacto de Noelia Poblete es 2616 30-4301. Para transferencias bancarias cuenta con el CVU: 0000007900273344557644. Alias: Noeliapoblete55.uala / cuit 27334455764