La Federación Argentina de Entidades Empresarias del Autotransporte de Cargas (Fadeeac) pidió hoy una resolución “urgente” a las demoras generadas por el cambio de política en el control sanitario fronterizo por parte de Chile, que implica el testeo del 100% de los chóferes que cruzan al país vecino y está ralentizando desde hace 48 horas el ingreso de más de mil camiones a la nación trasandina.
“Fadeeac expresa su preocupación por la situación en los pasos de frontera y reitera el pedido para que las autoridades de los diferentes organismos involucrados en el transporte de cargas internacional tomen cartas en el asunto”, señaló la entidad en un comunicado.
En ese sentido, el presidente de la Federación, Roberto Guarnieri, subrayó “la importancia de que las diferentes autoridades argentinas responsables del transporte internacional de mercaderías se involucren en el tema” ya que “a raíz del aumento exponencial de los casos positivos de Covid-19 que afecta a los funcionarios asignados a los controles en frontera, se producen cuellos de botella”.
De esta manera, Fadeeac se sumó al pedido de de la Asociación de Propietarios de Camiones de Mendoza (Aprocam) para que “de modo urgente se solucione la situación generada en la frontera con Chile”.
Asimismo, la entidad alertó sobre “panoramas similares en los pasos con Brasil y Uruguay ante el incremento de los contagios”.
Luego de que los trabajadores de la Aduana de Chile hicieran un paro el viernes último tras registrarse un brote de Covid entre sus integrantes, el gobierno trasandino ordenó realizar análisis PCR en frontera a los más de 900 camiones que cruzan cada día el Corredor Internacional, precisó Fadeeac.
Desde Aprocam explicaron que “el problema es que hay sólo 5 puestos para realizar esos análisis, por lo que sólo se testea cada media hora a 5 choferes, los que a su vez deben esperar algunas horas hasta obtener el resultado para continuar su camino”.
“El nuevo cuello de botella, que ya lleva dos días, implica pérdidas de millones de dólares para el comercio internacional, y pérdida de turnos en los buques en medio de una logística internacional por demás complicada a raíz de la pandemia, así como el impacto sobre los conductores que aguardan allí sus turnos para poder cumplir con su trabajo”, concluyó la Federación transportista.
Ante la eventualidad generada por la cantidad de transporte de carga que viene sufriendo demoras, Gendarmería Nacional está aplicando retenes en Uspallata y Punta de Vacas, y deja circular a los camiones a medida que desde el puesto Los Libertadores, en Chile, los van liberando.